PARTIDO POPULAR

Aguirre fulmina a los miembros de su Gobierno que dieron su apoyo a Rajoy

Por Irene E. Sánchez2 min

España29-06-2008

“Un verso suelto” en el PP. Así es como se considera la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre que, si bien pareciera haber enterrado el hacha de guerra durante el XVI Congreso Nacional de los populares, en los últimos días ha vuelto a la carga, primero cesando de su Gobierno autonómico a aquellos consejeros que dieron su apoyo Rajoy y después insistiendo en que, tras el cambio de aires del PP sus votantes se encuentran “desconcertados”.

Ella mismo en las semanas previas al Congreso de Valencia solicitó a Rajoy un esfuerzo para integrar dentro del partido a todos aquellos que no pensasen como él o incluso que fuesen críticos con su gestión. No obstante, el mismo 26 de junio el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Alfredo Prada, fue cesado de su puesto al entrar, por petición de Rajoy, en la nueva Ejecutiva del PP. Una marcha que se ha producido junto con otro incorporado a la lista presentada por el nuevo líder en el Congreso, Manuel Lamela. Aguirre había previamente advertido a Prada de lo que le pudiera suceder, cuando le comentó “tú sabrás lo que haces”. Ambos, Aguirre y Prada, habían hablado antes del Congreso acerca del posible nombramiento, algo que no gustó demasiado a Aguirre sobre todo porque Prada se limitó a informarle de su puesto como vocal en la nueva lista de Rajoy. Es decir, no se trató de una consulta, sino de una mera información, de algo que se iba a dar inevitablemente y que ya había sido lo suficientemente meditado como para hacerse realidad. El disgusto de Aguirre se agravó porque fue Rajoy el que le había pedido dos nombres de confianza para poder contar con ellos en un futuro. Por ello, en cuanto a Güemes, incluido a su vez en los órganos de dirección del PP, no ocurre lo mismo que con los anteriores, puesto que su nombre fue propuesto por la presidenta a Rajoy, algo que le comunicó en la Asamblea, con un testigo, el secretario general del PP en Madrid, Francisco Granados. La presidenta tenía en mente un cambio en su gobierno, que tras el final del Congreso no dudó en comenzar a llevar a cabo. Podría haber pensado en él con anterioridad, a la vista de que no se inmutó apenas por la marcha de Güemes, como uno de los cambios principales dentro de su equipo en Madrid. Aún se recuerdan las palabras de Rajoy cuando avisaba de que “quien no quiera estar en el PP, puede marcharse al partido liberal”. Lo decía en referencia a aquellos dirigentes que en aquellas fechas comenzaban a cuestionar su liderazgo y concretamente la presidenta del Comunidad de Madrid que por entonces amagaba con presentase como alternativa a dirigir el partido. Cierto es que pareció haber olvidado tales mensajes cuando comenzó el Congreso del PP, en el que dio su apoyo a Mariano Rajoy. "Tuve muchas peticiones para presentar una lista alternativa, pero presiones ninguna", comentó. Pese a que la situación se calmase durante la semana del Congreso, actualmente Aguirre vuelve a la carga y arremete contra el líder al que votó hace apenas dos semanas. Critica, ante todo, que Rajoy no haya integrado a los que no están de acuerdo con las líneas que él marca, aunque asegura no sentirse mal por ello, sino todo lo contrario. “Me siento muy bien siendo un verso suelto. Para estar tranquilo en esta vida lo que tiene uno que estar es de acuerdo con sus principios y todas mis decisiones las he tomado conforme a ellos", dice.