TENIS

Arantxa y Robredo, la sorpresa de la Copa Hopman

Por Laura Verdura2 min

Deportes05-01-2002

España resolvió en el partido de dobles mixtos el título del equivalente mixto de la Copa Davis y la Copa Federación: la Copa Hopman. Formando pareja con el joven Tommy Robredo, Arantxa Sánchez-Vicario consiguió su segundo título, después del logrado en 1990 con su hermano Emilio.

La veteranía de Arantxa, unida al buen momento de forma y el desparpajo de Tommy Robredo, pudo con la pareja estadounidense, Mónica Seles y Jan-Michael Gambill. Con un juego sólido, España solventó con una facilidad inusitada la final de la Copa Hopman: el resultado, 6-4 y 6-2. Arantxa Sánchez no pudo con Mónica Seles en el primer punto, y cayó derrotada por 6-1 y 7-6 (8-6 en la muerte súbita). No obstante, Tommy Robredo recuperó las opciones españolas al vencer a Jan-Michael Gambill por 6-3, 2-6 y 7-6 (7-2). Así, España se adjudicó su segunda Copa Hopman después de 12 años, la anterior ocasión, en 1990, también con Estados Unidos como rival. España anduvo con paso firme en el grupo B, cuyos partidos contó por victorias. El primer rival, Argentina, cayó con contundencia. Arantxa ganó por 6-2 y 6-3 a Paola Suárez, y Robredo a Mariano Zabaleta por 4-6, 6-2, 6-3. Los dobles cayeron del lado español por 4-6, 7-5 y 7-6 (10-5). Suiza, defensora del título, corrió idéntica suerte: Arantxa arrolló a Miroslava Vaurinec (6-2 y 6-0), y Robredo se impuso a Roger Federer por 7-6 (9-7 en el tie-break) y 6-2. Los dobles no tuvieron color: 6-2 y 6-3. Australia, el rival más potente, también había vencido a los argentinos y los suizos, pero la varicela que sufrió Lleyton Hewitt le impidió plantar cara a la dupla española. En el grupo A, Estados Unidos se jugó el pase a la final contra Bélgica y lo consiguió en los partidos individuales. Seles derrotó a Kim Clijsters por 4-6, 6-4 y 6-2, y Gambill hizo lo propio con Xavier Malisse por un doble 7-6. Los belgas sólo pudieron lograr el punto del honor en los dobles, que ganaron por 7-6 y 6-2. Italia, que se deshizo de Grecia en la única eliminatoria previa, y Francia, que no ganó ni a Bélgica ni a Francia, apenas fueron comparsas.