RENOVACIÓN DEL PP

Sáenz de Santamaría, de las faldas de Rajoy a protagonizar la renovación

Por Angie Rigueiro5 min

España01-04-2008

Recientemente fue nombrada como la política española más atractiva en una encuesta de Internet. Con gesto aniñado, alegre, joven, Soraya Sáenz de Santamaría ha sido la nueva apuesta del líder del PP, Mariano Rajoy, para dar un nuevo aire al partido. Para ello, ha sido nombrada como portavoz del Partido Popular en el Congreso.

El mundo de la política es un camino difícil para el género femenino. Pocas mujeres desempeñan cargos de gran responsabilidad. Una de ellas es Soraya Sáenz de Santamaría, mano derecha y persona de máxima confianza de Rajoy. El nombramiento no ha sido acogido con la misma alegría para todos. El sector más conservador del partido no termina de ver con buenos ojos la decisión de su líder. Sin embargo, como portavoz del congreso, Pío García Escudero, hombre de Aznar, sí ha renovado su cargo. Soraya ha roto todos los moldes, al constituirse como la primera mujer que encabezará la Portavocía popular en el Congreso. Un puesto que ella ha recibido con orgullo y responsabilidad. Con fama de mujer trabajadora, inteligente, con gran empuje, muy joven (tan solo 36 años) y en su currículo, más allá de la carrera política, consta una oposición como abogada del Estado. La piedra angular sobre la que Rajoy va a llevar a cabo su proceso de renovación del PP nunca ha tenido problema en contar la buena relación que mantenía con su mentor. Cuando se hicieron públicas las listas del PP, Rajoy llamó a Soraya para comunicarle que él sí iba a preocuparse por ella. Por ese motivo, muchos afirman que, la que ha sido secretaría de la política autonómica del PP en plena vorágine estatutaria, es la niña protegida y querida de Rajoy. Soraya Sáenz de Santamaría afirmó que su formación ejercerá una "oposición firme y constructiva, responsable y sólida, pegada a la calle, a la gente, a sus problemas y necesidades". Los populares han expresado su deseo de establecer durante esta Legislatura una "relación de diálogo sereno, pero serio", con su homólogo socialista, José Antonio Alonso. Entre los populares no todos se han tomado de la misma manera la decisión de Rajoy de nombrar a su mano derecha como portavoz en el Congreso. Algunos, ven en este nombramiento un nuevo aire a un PP que lo necesita más que nunca. Sin embargo, una parte importante del partido, sobre todo el sector más conservador, no han recibido con tanta alegría este nombramiento. Sáenz de Santamaría es el aire nuevo que no reflejaba desde hacía mucho tiempo su antecesor: Eduardo Zaplana. Éste, en su nombramiento como portavoz en el Congreso, también provocó el recelo de muchos miembros del partido, como le ha ocurrido ahora a Soraya. Muchos definen a Eduardo Zaplana como el hombre duro que necesitaban los populares la pasada Legislatura. Sin embargo, otros le tachan como un político de una notable indefinición ideológica, flexible para interpretar los discursos oficiales en el PP y que su papel quedó marcado por el tono que impuso Rajoy a los socialistas. Miembros de su partido afirmaron que al comenzar su andadura política simpatizaba más, ideológicamente, con el centro. Sin embargo, en el Gobierno y como portavoz en el Congreso, reflejó la versión más dura del PP en una Legislatura ya de por si sobrada de crispación. Los sectores más críticos dentro del PP llegaron a afirmar que, el tiempo que Zaplana estuvo como portavoz, supuso un riesgo para la cohesión interna. PIO GARCÍA ESCUDERO, DE HOMBRE DE AZNAR A ESTRECHO COLABORADOR DE RAJOY Junto al nombramiento de Sáenz de Santamaría, Rajoy también ha hecho público la renovación de Pío García Escudero en su cargo como portavoz del Senado. García Escudero, profesional con una gran activa vida política, estudió el bachillerato en Madrid, donde tuvo como compañero a Aznar. Por ese motivo, su relación con el ex presidente del Gobierno siempre ha sido muy estrecha. A pesar de su gran devoción por la política, García Escudero se licenció en Arquitectura en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid. Sin embargo, la vida le llevó a ser una figura principal en la vida política española. Siempre ha desempeñado un papel eficiente para el partido en los puestos que ha ido ocupando, debido a que ha sido reelegido con frecuencia. En 1991 fue elegido diputado en la Asamblea de Madrid, reelegido en 1995 y 1999. La Asamblea de Madrid le nombró senador autonómico en julio de 1995, 1996 y 1999. Tras la victoria de los populares en los comicios de 1996, García Escudero fue asignado portavoz del PP en el Senado. Fue presidente del PP madrileño desde el IX Congreso regional, y reelegido en los congresos de 1996, 1999 y 2002. Finalmente, abandonó el cargo en 2004. Cuando García Escudero dejó la presidencia del PP madrileño provocó el duelo entre los dos políticos más enemistados del PP: Esperanza Aguirre y Alberto Ruíz Gallardón. Ambos querían alcanzar el liderazgo de la formación en Madrid, batalla que ganó Aguirre. También trabajó junto a Gallardón, al ser el número dos de la candidatura popular al Ayuntamiento de Madrid, en el 2003. Tras el triunfo del PP, Gallardón le designó concejal de Urbanismo, Vivienda e Infraestructuras y segundo teniente de alcalde. Pero a pesar de su gran afinidad con Aznar, los últimos años de su carrera política han estado marcados por su colaboración codo con codo junto a Rajoy. Como portavoz del PP en la Cámara Alta, ha protagonizado numerosos debates con el presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero. Sáenz de Santamaría y Pío García Escudero son los primeros nombramientos que Rajoy ya ha hecho públicos. Nombramientos que reflejan la renovación que el PP busca en esta Legislatura de oposición.