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ESTADOS UNIDOS

Obama vence el primer asalto ante Hillary Clinton

Por Luis Miguel L. FarracesTiempo de lectura2 min
Internacional06-01-2008

El senador por Illinois y aspirante a convertirse en candidato demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, Barack Obama, logró imponerse a Hillary Clinton en la primera etapa de las primarias de su partido celebrada en Ohio. Clinton, su principal rival y hasta hace poco gran favorita para hacerse con la candidatura, vio como las especulaciones de los últimos meses acerca del crecimiento de los seguidores de Obama en el seno de su partido se hacían realidad y no pasó el corte del estado sureño, históricamente clave para la elección final.

Los analistas norteamericanos coinciden en que el voto joven se ha dejado seducir, al menos en Ohio y posiblemente a lo largo de todo el país, por el mensaje de cambio de Obama. Con un discurso no excesivamente profundo y que tiende al romanticismo en ciertas ocasiones, el senador por Illinois ha conseguido encandilar a las bases de su partido. La clave: promesas que tienden al populismo como la retirada de tropas de Iraq, que enmascaran su déficit de política económica y su menor peso en la escena internacional si se compara con la saga de los Clinton. Con todo, Obama se ha consolidado en los últimos meses como el candidato de aquellos ciudadanos que se sienten alarmados por la baja popularidad de su país en el extranjero, aquellos que difieren de la política internacional republicana y, en definitiva, aquellos que quieren que el reemplazo de George W. Bush en la Casa Blanca no represente un cambio a medio plazo, sino a corto. Para mayor interés de esos soñadores demócratas el perfil de ruptura con el statu quo de Obama queda incluso acentuado por el hecho de que podría convertirse en el primer presidente negro de Estados Unidos, todo un hito histórico. América parece anhelar una revolución y la primera prueba de ello es la victoria de un candidato negro en un estado rural del sur y de mayoría étnica blanca. Enfrente, Hillary Clinton parece desinflarse. De ser la candidata favorita ha pasado a jugarse un mano a mano con Obama y a perder en Ohio por un 37 a 29 por ciento. Además, al cierre de la edición de este periódico los sondeos en Nueva Hampshire, el segundo asalto de las primarias demócrata y republicana, dan como vencedor a Obama. Pero si hay algo interesante de las reacciones a los resultados de los caucus de Ohio es la cobertura mediática de demócratas y republicanos. Mientras que la victoria de Obama ha estado en la boca de todos los líderes de opinión internacionales, los resultados de las primarias republicanas han pasado totalmente desapercibidos. En ellas el ex gobernador de Arkansas y pastor evangélico, Mike Huckabee, se impuso al mormón Mitt Romney, en segundo lugar, y a Fred Thompson, tercero. El triunfo de Huckabee no pareció ser noticia en Estados Unidos ya que el gran número de seguidores de su Iglesia le aseguraban la victoria, pero más allá de ello, su victoria no fue noticia por un pensamiento cada vez más claro en todos los ciudadanos, que los republicanos, gane quien gane las primarias, no repetirán en la Casa Blanca. La baja popularidad del presidente Bush y los malos resultados en los comicios para renovar el Senado y el Congreso parecen atestiguarlo. Así que de algún modo, existe un pensamiento más o menos general acerca de que de la pugna entre Clinton y Obama saldrá el nuevo presidente de Estados Unidos. Un presidente que sea cual sea entrará en la historia, bien por ser el primer residente negro o la primera mujer presidenta del país.