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FILIPINAS

Nueva intentona golpista mientras la presidenta ultima su viaje a España

Por J. F. LamataTiempo de lectura3 min
Internacional02-12-2007

Varios militares encabezados por los generales Lim y Triyanes se sublevaron en un hotel de lujo de Manila donde quedaron atrincherados. "Hemos retirado nuestro apoyo a la señora Gloria Macapagal Arroyo para poner fin a la ocupación ilegal e inconstitucional de la presidencia". Pero el golpe dio en seguida una imagen de chapuza improvisada. Los dos generales debían ir a comparecer por su participación en los hechos de 2003, pero se las apañaron para engañar a sus escoltas y dirigirse al hotel.

El nombre de Danilo Lim ya apareció implicado en la intentona golpista del verano de 2003, donde también se acusó al incorregible senador Honasan -el mismo que provocó hasta seis intentonas golpistas durante el mandato de Cory Aquino-. Pero cuando más armó ruido fue en febrero de 2006, cuando fue arrestado y se le acusó de estar planeando un nuevo golpe de Estado coincidiendo con el 20 Aniversario de la caída de la dictadura de Ferdinand Marcos. Tras la asonada de Querubín de entonces, la presidenta aprovechó aquel golpe de Lim para encarcelar a sus rivales políticos e impedir unas manifestaciones que deterioraran su imagen en tan célebres fechas. El cambio de actitud del senador Triyanes "Sólo saldré de aquí con los pies por delante", había dicho el senador y general Antonio Triyanes. Para luego, sorprendentemente, cambiar de actitud en un par de horas cuando anunció que se rendía por la seguridad de los periodistas. "No podríamos vivir con nuestra conciencia si alguno de ustedes resultara herido en el fuego cruzado. No podemos permitirlo". El cambio de actitud da pie a editoriales que la califican de "sospechosa" pues podría haber pedido a los periodistas que salieran y él haber permanecido dentro. Algún medio explicaba diciendo "demuestra que no creída de verdad en sus ideales". Lo que sí es verdad es que Antonio Triyanes fue elegido senador al obtener el voto de más de 11 millones de filipinos y la presidenta no le había permitido en ningún momento ocupar su acta, lo que suponía saltarse la Constitución con un dirigente destacado de la llamada Genuina Oposición. Mal van las cosas si entre los nombres que se pueden barajar como sospechosos junto a los de toda la vida -Enrile, Honasan...- pueden aparecer el de la familia Aquino y otros de ese sector -también miembros de la Genuina Oposición-. El día antes de Bonifacio ¿Por qué no aguantó un día más? Es quizá la mayor pregunta que se hacen los analistas de este golpe. El día 30 de noviembre se celebraba la fiesta de Bonifacio (histórico héroe filipino), es tradicional la movilización de la izquierda y era muy fácil de prever que éstos aprovecharían la ocasión para manifestarse justo delante del hotel para proteger a los amotinados contra Gloria Macapagal Arroyo. La elección de la fecha del golpe parecía responder totalmente a esta idea pero ¿por qué entonces se rindieron justo antes? La sombra de un pacto o un beneficio oculto está en el ambiente. El viaje a España de Gloria Macapagal Arroyo De haberse prolongado unas horas más, quizá el golpe no hubiera triunfado, pero lo que sí es seguro es que hubiera obligado a la presidenta a suspender su agenda europea, empezando por el viaje a España y eso hubiera dañado mucho la imagen de estabilidad que se quiere dar del país. Los mensajes de Gloria Macapagal Arroyo de regeneración democrática han perdido toda credibilidad desde que indultara el mes pasado al ex presidente Joseph Estrada, que tan solo un mes después de ser condenado a cadena perpetua ha podido gozar de su libertad, en un claro intento del Gobierno de lograr nuevos aliados. Para Macapagal Arroyo este golpe es obra de elementos de ultraderecha y ultraizquierda unidos contra ella, su lema desde hace un año. En un momento en el que se acusa reiteradamente a la presidenta de corrupción de haber falseado su reelección de 2004 y de violar la constitución al permanecer en el poder más de lo establecido legalmente, Gloria Macapagal hace una nueva visita a España. Se da la circunstancia de que ésta ya visitó España en junio del año pasado en una visita a la comunidad filipina, pero al no ser visita de Estado se quedó sin poder usar el Palacio de El Pardo y sin cena con el Rey, algo que ahora quiere corregir haciendo su visita de Estado oficial y siendo, por tanto, recibida con todos los honores.