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INFANCIA-JUVENTUD

Internet, una vía hacia la violencia juvenil

Por Paula PortasTiempo de lectura1 min
Sociedad09-11-2007

La red constituye una fuente de entretenimiento para niños y adolescentes. Los padres no les controlan y tienen acceso a contenidos web perjudiciales para ellos. La violencia es un elemento común de muchas páginas que, no sólo la muestran como algo natural, sino que incitan a ella.

La violencia también está presente en Internet, hay infinidad de páginas web que muestran violencia e incitan a ella, páginas de organizaciones radicales y movimientos terroristas que intentan justificar ideológicamente hechos violentos, páginas promovidas por sectas ilegales, otras relacionadas con la pornografía infantil o incluso videojuegos en que los participantes deben desarrollar acciones de gran violencia en los mundos virtuales que recrean. Espacios de chat y todo tipo de foros virtuales, frecuentados por personas y grupos que hablan sobre temas violentos, fantasean con ellos e intercambian información e imágenes sobre actuaciones violentas. Según un estudio de la Universidad Pública Vasca, los jóvenes no consideran que Internet suponga un peligro ya que, según ellos, dominan la situación. Los jóvenes reconocen los peligros, pero creen que pueden evitarlos si no se accede a esas páginas. En el caso de los niños, la falta de una adecuada atención por parte de los padres les deja vía libre para acceder sin control a la red. Si el ordenador familiar no dispone de filtros que limiten el acceso a las páginas inadecuadas, lo que empieza por curiosidad, puede acabar en una adicción, al ser los niños y adolescentes fácilmente seducibles. La lucha contra estas formas de violencia en la red requiere un mayor desarrollo de la legislación que regula su uso para asegurar una protección de los menores. Las medidas pasan por inculcar la adquisición de hábitos de trabajo y dotar de instalación de programas de protección que limiten el acceso a determinadas páginas web y que, además, alerten a niños y jóvenes de los riesgos del uso indebido de Internet. Los medios de comunicación social también deberían alertar a los ciudadanos sobre las páginas web con contenidos ilegales y la conveniencia de denunciarlas.