NÓMINAS DESPROPORCIONADAS

Los sueldos de algunos alcaldes obligan a los partidos a buscar soluciones

Por Elena Gómez Fernández3 min

España26-07-2007

Alcaldes de administraciones locales que se suben el sueldo entre un 25 y un 60 por ciento, o que cobran más que algunos ediles de grandes ciudades. Esta realidad se ha dado en varios ayuntamientos tras las elecciones municipales del pasado 27 de mayo por lo que algunos partidos ya han presentado alternativas para poner fin a esta desproporción.

En la actualidad, un vacío legal permite a los alcaldes subirse el sueldo a su antojo, pero se han dado casos recientes como el del alcalde de la localidad malagueña de Mijas, Agustín Moreno, que renunció a su acta de concejal después de negarse a rebajar su salario, que había aumentado en un 37 por ciento. También el alcalde de Torrelodones, Carlos Galbeño, perteneciente al PP, decidió subirse el sueldo un 30 por ciento de modo que su salario, de 91.445 euros al año, le convirtió en el regidor mejor pagado de España tras el de Barcelona. Por ello, los partidos estudiarán imponer límites mínimos y máximos a los sueldos que cobran los cargos públicos de las administraciones locales. Los escandalosos salarios de que se han dotado algunos alcaldes y concejales tras las elecciones municipales ha puesto en evidencia la necesidad de acotar por ley estos desmanes. Así lo estimaron el miércoles las formaciones firmantes del pacto antitransfuguismo durante una reunión que mantuvieron en el Ministerio de Administraciones Públicas para analizar el escenario creado tras los comicios de mayo. La iniciativa de restringir los emolumentos de los cargos públicos partió de IU, pero fue aceptada por todos los partidos. Montserrat Muñoz, responsable de política municipal de la coalición, explicó tras el encuentro que los portavoces de todas las formaciones comparten que es “escandaloso que alcaldes y concejales de ayuntamientos muy pequeños tengan sueldos mayores que el presidente del Gobierno”. Un “espectáculo bochornoso” que, recordó, se repite después de cada elección municipal, ya que es el momento en que los plenos locales fijan los salarios. Una de las formaciones que más en serio se ha tomado la propuesta de poner freno a esta subida de sueldos desmesurada ha sido el Partido Popular de Galicia. Esta formación propone fijar una horquilla en lo que consideran unos sueldos desproporcionados, ya que creen que debería haber un criterio de asignación de los mismos según la zona a regir. “No es lo mismo gobernar en una gran ciudad, que en un pequeño municipio“, aseguraba no hace mucho el presidente de la Fegamp, Xosé Crespo. El Partido Popular gallego trató el viernes esta cuestión durante una reunión interparlamentaria. Al término de la misma, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, reclamó una reforma de la Ley Gallega de Régimen Local para “fijar una horquilla retributiva que sea de obligado cumplimiento para todos los ayuntamientos“. También defendió la necesidad de establecer límites en los sueldos por lo que llamó la atención sobre el incremento entre un 25 y un 60 por ciento del coste registrado en algunas corporaciones locales, tras el panorama político del 27-M, donde el 90 por ciento de los alcaldes se subieron el sueldo. Como ejemplo del escandaloso aumento en algunos de los ayuntamientos, Núñez Feijóo, citó el incremento de un 56 por ciento de las retribuciones a los miembros del gobierno municipal de Cuntis, PSOE-BNG, frente a Pontecaldelas, gobernado por el PP, ambos ayuntamientos pontevedreses de entre 5.000 y 6.000 habitantes. También destacó el aumento en un 61 por ciento de los sueldos en Moaña, frente a Cambados o la subida de un 30 por ciento de la corporación de Marín, a los que sumó el 288 por ciento de incremento en Abegondo, del 85 por ciento en Cee y el incremento de dedicaciones exclusivas en Carballo, Culleredo o Noia, todos ellos gobernados por socialistas o nacionalistas.