TECNOLOGÍA

Nace Omemo, un disco duro virtual para la descarga de archivo on-line

Por Paula de Oriol2 min

Comunicación16-07-2007

La guerra de la legalidad o ilegalidad de las descargas en Internet sigue en pie. El ministro de Industria, Joan Clos, se muestra reticente a regular contra el intercambio de archivos on-line y, mientras tanto, nace en España Omemo, un disco duro virtual que revolucionará el modo de descargar música, películas, texto e imágenes a través la Red.

Hasta ahora, las investigaciones sobre el software colaborativo estaban muy mal vistas, pues daban como resultado programas como Emule, que permiten la descarga de contenidos ilegales. Sin embargo, una empresa española ha creado Omemo, un disco duro que pretende revolucionar la manera en que la gente comparte archivos La empresa lo define como “un disco virtual en el que los usuarios ceden una parte de su disco duro a la red.” El usuario puede colocar en el disco duro virtual cualquier archivo, trabajar con él como si de uno físico se tratara y acceder a todos los que ya existen en la red. Esta novedad ofrece muchas ventajas sobre los otros. En Emule, por ejemplo, cuando el usuario que esta cediendo el contenido se desconecta, el receptor tiene que esperar a que vuelva a la red para continuar descargando. Con Omemo, esto es diferente ya que una vez puesto un documento en el disco virtual nadie puede borrarlo o modificarlo, ni siquiera su creador. Asimismo, es extremadamente seguro: el archivo en cuestión es troceado en paquetes de 64 KB, a cada trozo se le imprime una huella digital única, después se encriptan los trozos y antes de lanzarlo a la red se les asigna un identificador que permite al sistema su posterior rastreo y recomposición en el archivo original. Por otra parte, mientras nace Omemo, el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos, se muestra reticente a regular contra las descargas de Internet, según señaló en un Foro de ABC. Tan sólo en Estados Unidos se practica una actividad contra las descargas: la aparición de una ventana con contenido moral (que pretende actuar sobre la conciencia) cada vez que un usuario descarga algo ilegal. Para llevar a cabo esta practica, sería necesario saber los archivos que descarga cada persona. Hacer esto significa, para Clos, quebrar el derecho a la privacidad y por ello busca otras alternativas que eviten que lo jóvenes descarguen contenidos ilegales. Controlar las descargas sería como “poner puertas al campo”.