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FÚTBOL

Tres regresos y un ¬novato¬ para la Segunda División

Por David del OlmoTiempo de lectura3 min
Deportes24-06-2007

Racing de Ferrol, Córdoba, Éibar y Sevilla Atlético son los nuevos equipos de la Segunda División después de haber superado las dos rondas de la fase de ascenso. Algunos históricos que partían como favoritos, como Rayo Vallecano o Pontevedra, se quedaron en el camino.

Eibar El Racing de Ferrol y el Éibar apenas han tardado una temporada en recuperar la categoría perdida en junio del pasado campeonato. El conjunto vasco es uno de los dos primeros clasificados que ha conseguido el ascenso, lo que demuestra que no basta con ser el más regular, sino que tan importante como acceder a la fase de ascenso es saber disputar esos partidos trascendentales. Y eso lo supo hacer el conjunto armero, que se deshizo en primer lugar del L’Hospitalet: tras el empate sin goles en tierras catalanas Lluis Codina y Juan Carlos Rebollo sentenciaron en Ipurúa. Después, en una eliminatoria con mucha chicha, el equipo vasco pudo con el Rayo Vallecano, que había dejado atrás al Portuense por un global de 4-2. Los madrileños se llevaron desde el Teresa Rivero un gol de Francisco Medina, Piti, que les convertía en favoritos. Pero en la vuelta los azulgranas dieron la vuelta al marcador con los tantos de Ander Alaña y Eneko Romo, que hicieron justicia a los méritos de uno y otro conjunto. Racing de Ferrol El equipo ferrolano no partía como favorito en un difícil grupo en el que cualquiera de sus rivales (Linares, Alicante y Real Unión) tenía grandes opciones. Sin embargo, la experiencia de los gallegos se impuso. Primero lo hizo ante el Linares. Gustavo García y de Jonathan Carril marcaron para el Ferrol en la ida y Dani Bouzas y Postigo igualaron la eliminatoria en la vuelta. Pero en los lanzamientos de penalti, después de una prórroga infructuosa, pasaron los gallegos. Mientras, el Alicante eliminaba al Real Unión y era su último obstáculo antes del ascenso. Fabien Lamatina y Francisco Corredoira sellaron en la ida, en A Malata, un marcador que los alicantinos encontraron insalvable en la vuelta, ante sus aficionados. Un gol les faltó para equilibrar la balanza. Córdoba Con su máximo artillero, Javi Moreno, lesionado para el playoff, y con el Pontevedra como primer rival, todo parecía encaminado a un triste y prematuro final para el Córdoba. Pero dos empates ante los gallegos y el valor doble de los goles conseguidos en el terreno de juego contrario les auparon a la segunda y decisiva eliminatoria. En ella, el Huesca, verdugo del Palencia en una intensa eliminatoria en la que los postes –uno en cada partido- se aliaron con los oscenses, fue la víctima propicia para el regreso cordobés, dos temporadas después, a la Segunda División. Dos goles en el Nuevo Arcángel llevaron en volandas al Córdoba de Pepe Escalante --su nuevo entrenador será el ex defensa internacional Paco Jémez-, que sólo tuvo que empatar en El Alcoraz para celebrar el éxito. Sevilla Atlético El otro favorito para el ascenso era el filial del equipo de moda, el Sevilla Atlético, con una nueva hornada de buenos futbolistas, enfrentado a equipos veteranos más curtidos en estas lides. Después de un inicio titubeante, con una derrota por la mínima, le endosaron cuatro goles al Universidad de Las Palmas de Gran Canaria que no dejaron lugar a la duda. Pero la prueba de fuego la sufrieron con el Burgos (que eliminó al Alcoyano en la tanda de penaltis, sin haberle marcardo ni un solo gol). En El Plantío, los andaluces sacaron un nuevo empate a cero y, en la vuelta, un gol en la prórroga le dio el ascenso al joven Sevilla. Así, el filial sevillista regresó a la segunda categoría del fútbol español, en la que sólo había jugado en la temporada 1962/63.