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FÚTBOL

El Madrid recurrió a la fe para ser campeón

Por Jesús RosellTiempo de lectura3 min
Deportes18-06-2007

La temporada 2006-2007 pasará a la historia por ser una de las más emocionantes de la historia. Hasta tres equipos se mantuvieron con opciones de título hasta el final, pero finalmente fue el Real Madrid el que demostró su mayor regularidad. Sorpresas y decepciones completan un elenco de equipos que harán un ejercicio de meditación para ver qué se puede mejorar para mantenerse o para mejorar.

El Real Madrid logró el título de Liga después de una temporada llena de altibajos para los merengues. El equipo de Fabio Capello tuvo un inicio de campeonato muy irregular, y no consiguió enderezarlo hasta bien avanzada la temporada. Al final la fe en el equipo y la capacidad de superación de los propios jugadores hizo posible que, tres años después, la afición blanca saboree un título. Detrás del Madrid quedó el Barcelona, que creyó a mitad de temporada que tenía el título en sus manos. Esta confianza fue determinante en el declive de resultados y confianza. El Sevilla fue el que mantuvo un nivel de juego más regular. Los hispalenses, pese a mantenerse en las tres competiciones que disputaban, nunca dio síntomas de cansancio, lo que dificultó el trabajo a sus rivales. Uno de ellos, el Valencia, sí que tuvo momentos de gloria y momentos de tensión. Los problemas internos y el bajo nivel de juego no convencían ni a la afición ni a la directiva. Sólo David Villa y David Silva mantuvieron el tipo a lo largo de la temporada. Los puestos de la UEFA pasaron a manos de Villarreal y Zaragoza. Los castellonenses se repusieron al mal inicio de Liga y lograron superar la marcha de Juan Román Riquelme. Los maños demostraron ser uno de los equipos más complicados de vencer, tanto en casa como fuera de su estadio. El Atlético de Madrid tendrá que esperar a la Copa Intertoto para saber si volverá a saber lo que es jugar en Europa. Uno de los equipos revelación de esta temporada es el Recreativo de Huelva. De la mano de un gran Marcelino García Toral, el conjunto onubense se convirtió en un hueso duro de roer para cualquier equipo que se le ponía por delante. Una buena prueba de ello fue el 0-3 que endosaron al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Pasada la mitad del campeonato hubo un bajón de nivel, pero siempre con sensación de peligro. El Deportivo de la Coruña no rindió al nivel esperado. Tampoco es que fuera una temporada exigente para los de Joaquín Caparrós, quizás por la enorme juventud de los blanquiazules, pero sí que se esperaba que lucharan por los puestos europeos. Javier Arizmendi apareció en pocas ocasiones, pero no fue el delantero resolutivo que se esperaba. Los fichajes no respondieron a las expectativas creadas y esto tuvo como resultado la tranquilidad en la tabla, pero sin ningún aliciente más. El Getafe dio la talla a lo largo de la temporada, pero en ocasiones no dio la talla en los momentos importantes. Bernd Schuster logró, una vez más, crear un equipo compacto, con nuevos jugadores, después de que le quitaran a la mayoría de los que destacaron el curso anterior. Osasuna, Espanyol, Mallorca y Racing pasaron algunos apuros a principio de temporada, pero al final lograron recomponerse y terminar la temporada en posiciones tranquilas. Peor lo pasaron Osasuna y Levante, que hasta las jornadas finales no supieron si iban a luchar por no descender, aunque tuvieron la suerte de asegurar la permanencia. No tuvieron tanta suerte Celta, Real Sociedad y Nastic de Tarragona, que tendrán que luchar la temporada que viene para volver a la máxima categoría. Los de Cristo Stoickhov tuvieron un pie en Primera a falta de diez minutos para el final del último partido, pero los dos goles de Edu para el Betis condenaron a los vigueses al descenso. La Real fue la que tuvo una mejor reacción de cara a una posible reacción, pero ésta llegó demasiado tarde. La llegada de Savio Bortolini en el mercado invernal dio aire fresco a los vascos. Incluso a falta de una jornada pudo haber sacado a los suyos del descenso, pero un penalti errado en el descuento frente al Racing frustró esa posibilidad. Cuarenta años después la Real volverá al infierno de segunda. El Nastic siempre apuntó como el primer equipo en lograr el descenso matemático y no varió estos pronósticos.