TOROS

José Tomás vuelve y triunfa en Barcelona ante un revalorizado Cayetano

Por Almudena Hernández2 min

Espectáculos17-06-2007

El toreo sabe a crema catalana. O por lo menos a eso supo el pasado domingo 17 de junio en la Monumental de Barcelona. Los amantes de las efemérides ya tienen una fecha más, la de la reaparición de José Tomás, uno de los diestros que más han marcado el toreo en las últimas décadas. Se fue inesperadamente del toreo en activo y su figura creció hasta encumbrarse como un auténtico mito.

En sus años de ausencia José Tomás ha echado a su toreo un poquito de azúcar. El silencio y el tiempo parecen haber sido el golpe de horno que requiere la más fina confitura. El postre estaba tostado tras horas, días y meses de reflexión fuera del traje de luces, enésimas reflexiones sobre la faena soñada, con el frío que se siente lejos del pitón, sin pisar el centro del ruedo en la más pura definición de la verticalidad. Estaba a punto y ya está aquí, ha vuelto. Toreará pocas tardes, todo está estudiado, programado, calculado, como un postre que se toma a cucharadas pequeñas. El toreo sabe a crema catalana. José Tomás ha vuelto a los carteles con aroma de vainilla y limón. Ha sido en la Monumental de Barcelona, ciudad declarada antitaurina, que se ha llenado ante el reclamo del regreso de uno de los toreros más destacados de las últimas décadas. No ocurría desde hace más de dos décadas. La reventa ha hecho el agosto, manejando cifras desorbitadas. E, incluso, los antitaurinos quisieron impedir que accedieran a la plaza los miles de aficionados que acudieron a la Ciudad Condal desde numerosos puntos de todo el mundo. Sólo fue una anécdota. El esperado paseíllo se celebró y se rompió con una calurosa ovación dirigida a José Tomás, que la compartió con sus compañeros de terna, Juan Serrano Finito de Córdoba y Cayetano Rivera Ordóñez. Para la ocasión se lidió un encierro de Núñez del Cuvillo, que resultó bueno en líneas generales. El sexto fue premiado con la vuelta al ruedo. Pero José Tomás no estaba solo, como no lo estará en otros cosos. El escalafón de la Fiesta no es el mismo que el que dejó hace cinco años. Uno de los nuevos nombres que podrían brillar en los carteles junto al de José Tomás es el de Cayetano. El hijo mediano de Francisco Rivera Paquirri hizo disfrutar a los tenidos de la Monumental catalana con un toreo largo, de corte artista. Tanto, que sendas faenas fueron de menos a más y acabaron premiadas cada una con dos orejas. Abría el cartel Finito de Córdoba, que se fue de vacío en un día en el que la afición, predispuesta, al fin probó a qué sabe el toreo tomasista que reapareció en Barcelona.