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ETA

Las fuerzas de seguridad alertan de un atentado inminente

Por Angie RigueiroTiempo de lectura2 min
España10-06-2007

Las fuerzas de seguridad consideran que ETA se ha reorganizado y pueden actuar en cualquier momento. Han señalado "que hay que preparase para lo peor". Han advertido de un atentado inminente, por lo que se ha decretado el nivel 2 de alerta. La banda ha aprovechado el proceso de paz para renovar e incrementar sus arsenales.

ETA hizo público su comunicado de ruptura de la tregua después de que sus comandos se encontrasen en territorio español listos para actuar. De esta manera lo han valorado los responsables de las fuerzas de seguridad, por lo que advierten de las altas probabilidades de que un atentado terrorista esté a la vuelta de la esquina. La banda cuenta con capacidad para atentar de forma inminente. En su mano está en estos instantes elegir en qué momento provocar un atentado. El presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, ha intentado mantener un proceso de paz a pesar de los acontecimentos que indicaban la nula voluntad de ETA de abandonar la violencia. La presencia de células etarras en España ha sido una evidencia desde finales de diciembre del año pasado, cuando una ertzaina que paseaba por el monte de Amorebieta descubrió un reguero de explosivo en polvo. Finalmente se localizó días posteriores el zulo donde se conservaba el material: una bomba preparada para ser empleada. Estos indicios permitieron detener a un colaborador de la banda cuando huía a Francia. Sin embargo, días más tarde, el 30 de diciembre, la banda voló por los aires la T-4 y mató a Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estacio. Para entonces, las fuerzas de seguridad han sabido posteriormente que los miembros del ¬comando Urederra¬ llevaban casi un año en Guipúzcoa y Navarra preparándose para actuar en cualquier momento. Tenían la orden de atentar inmediatamente si el etarra Iñaki de Juana, en el tiempo que estaba de huelga de hambre, fallecía por continuar con su protesta. El Cuerpo Nacional de Policía, después del atentado de Barajas, detuvo en Port Bou (Gerona) al etarra Iker Agirre. Parece ser que se dirigía a Valencia para buscar objetivos contra los que poder atentar durante la Copa América. Las fuerzas de seguridad tuvieron la certeza de que la banda no sólo estaba en el País Vasco sino que se extendía por toda la península. “ETA busca objetivos simbólicos y empleará gran cantidad de explosivos”, sostienen los investigadores. Los sectores que concentran la atención de las fuerzas de seguridad es el turístico. ETA lleva años atentando en la costa mediterránea durante las vacaciones de verano. Su objetivo es dañar un sector clave para la economía del país En Valencia, debido a que en la actualidad es el foco de atención internacional por la Copa de América, los controles han sido intensificados. La amenaza, genérica, de un atentado de ETA también preocupa en otros ámbitos deportivos. “A partir de ahora tengo que volver a mirar todos los días debajo del coche, por si me han colocado una bomba lapa”, relata un concejal en el País Vasco. Al igual que él, alrededor de 2.000 políticos, empresarios, policías, jueces o periodistas viven la ruptura del alto el fuego de la banda con temor, ya que figuran en las listas de posibles objetivos del grupo armado vasco.