ETA

Garzón permite a ANV concurrir a las elecciones si no hay pruebas nuevas

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón

Por Antonio Pérez4 min

España29-04-2007

La Audiencia Nacional consideró, tras valorar un informe de la Guardia Civil y la Policía, que las listas de Acción Nacionalista Vasca (ANV) no contienen el menor indicio “de pertenencia, integración, vinculación orgánica” de ANV con ETA o Batasuna. No obstante, el magistrado se reserva la posibilidad de cambiar su postura si hay nuevas pruebas que demuestren la relación entre las dos formaciones.

Luz verde a las listas de ANV en el País Vasco. El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha considerado que no se puede obligar a este partido a retirar las 225 listas electorales que ha presentado en distintos municipios vascos con las pruebas existentes y con un informe facilitado por la policía y la Guardia Civil. En sus conclusiones, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado hacen hincapié en que, a pesar de las afinidades ideológicas, no se puede deducir que ANV haya sido en el pasado o sea ahora sea un instrumento político de ETA ni de Batasuna. El juez recuerda en su auto que cuando “hay indicios”, como en el caso de Batasuna, Jarrai o Segi, se puede suspender o declarar ilícitas a determinadas formaciones de la izquierda abertzale, pero considera que no procede llevar a cabo “una cadena inacabable de suspensiones ni ilegalizaciones” si no hay pruebas probatorias “incontestables”. A juicio de Garzón, la simpatía de ANV por Batasuna y el aumento exponencial de un grupo político fundado en 1930 que, sin embargo, sólo congregó a siete decenas de simpatizantes en una de las últimas convenciones registradas de la formación, no supone un factor determinante a la hora de vincular a ambas formaciones. De esta manera la izquierda abertzale salva uno de los principales obstáculos para estar presente en las próximas elecciones municipales que se celebrarán el 27 de mayo. Si bien es cierto que el juez subraya que se trata de una decisión “provisional” a la espera de que pueda haber otros indicios desconocidos hasta el momento, que podrían desembocar en la ilegalización de ANV o de otras formaciones como Abertzale Sozialisten Batasuna (ASB), la marca presentada por los líderes de la ilegalizada Batasuna para participar en las elecciones, un extremo que está pendiente de la decisión que tome el Tribunal Supremo. El caso de ANV recuerda a las “listas blancas” del Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV) presentadas en las pasadas elecciones, en las que se presentaban personas sin antecedentes por delitos de terrorismo. Fueron la alternativa a la propuesta de la ilegalizada Batasuna, que trató de salvar los muebles con Aukera Guztiak, que también fue ilegalizada por su vinculación con la formación ilegal. Entonces, líderes como Arnaldo Otegi mostraron públicamente su simpatía hacia el PCTV, que obtuvo representación institucional. En este caso, Garzón no aprecia vínculos en la documentación incautada al etarra Mikel Antza ni de los contactos entre la persona acreditada de ANV en la Junta Electoral de Guipúzcoa, Mayte Ilarduya, y Aitor Aranzabal, miembro de Batasuna. Ni siquiera la documentación perteneciente al coordinador de Batasuna Jorge Murillo, que supuesta elaboró una de las listas de ANV sirvieron para determinar la relación entre ambas organizaciones, aunque Garzón envió a Murillo a prisión por la posibilidad de que perteneciera a la banda terrorista ETA. El Gobierno rastrea las listas de ANV para investigar si hay vínculos con Batasuna Llegados a este punto, la Fiscalía o la Abogacía del Estado serán los que puedan determinar si impugnan algunas de las listas presentadas en los distintos municipios. También el Tribunal Supremo podría declarar ilegal a ANV según la Ley de Partidos, pero la resolución judicial sería una vez que las elecciones se hubieran celebrado, con lo que las personas que pudieran haber sido elegidas mantendrían su puesto político hasta el fin de la legislatura. En el mismo sentido que el juez de la Audiencia Nacional se mostró la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que aseguró que “no valen sospechas, sino certezas y pruebas” para ilegalizar a un partido político, aunque destacó que la Abogacía del Estado podrá impugnar aquellas listas en las que pueda haber algún indicio de ilegalidad por su vinculación con Batasuna o ETA. Del mismo modo, el Fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, llegó a afirmar que es “complejo”, “largo” y “difícil” el procedimiento de la Ley de Partidos para ilegalizar a una formación política, por lo que consideró que esta vía no será la utilizada por el Gobierno. Lo que sí anunció Conde-Pumpido es que la Fiscalía impugnará todas las listas de ASB y que presentarán un número “muy importante” de impugnaciones en las candidaturas presentadas por agrupaciones electorales. Sin embargo, en el caso de ANV, advirtió que, “en principio, se presenta como un partido legal”. Por su parte, el titular de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró que es el Tribunal Supremo el que debe tomar decisiones en este ámbito y subrayó que, a pesar de los centenares de listas que tanto la Fiscalía General como la Abogacía del Estado están examinando, estos órganos llegarán a tiempo para haber investigado todas las posibles irregularidades antes de la jornada electoral. También el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, afirmó que no estará en las próximas elecciones “quien no tenga que estar”, en referencia a la posibilidad de impugnar listas de ANV, pero añadió que tampoco se debe interpretar “drásticamente” la Ley de Partidos. Algo que, paradójicamente, después matizó el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que remarcó en un mitin celebrado en Navarra que el Ejecutivo trabaja para que “solamente” concurran a las elecciones ”aquellos que respeten las reglas y el contenido de la Ley de Partidos”.