EMPLEO JUVENIL

‘Mileuristas’: la generación de los 1.000 euros o menos

Por Carmen Jardón2 min

Economía21-04-2007

Jóvenes, preparados, cercanos a la treintena, universitarios, comparten piso o viven con sus padres y con sueldos que rondan los 1.000 euros. Son los mileuristas. El término ha sido acuñado por una joven, Carolina Alguacil, que envío una carta al diario El País para protestar por la situación de este prototipo de joven que abunda cada vez más en la sociedad española.

Resulta difícil calcular el número de jóvenes que en España viven en esta situación, ya que debido a la precariedad laboral o a la ausencia de contratos las declaraciones de la renta gestionadas por la Agencia Tributaria no reflejan la totalidad de ingresos percibidos de manera extraordinaria por estos contribuyentes, y además la ausencia de un control oficial que regule la declaración hace que muchos de ellos la eviten. Dividiendo en cuatro tramos según sus ingresos a los mileuristas, se calcula que el número de jóvenes que gana hasta 1.500 euros anuales ronda casi el cinco por ciento; entre los 1.500 y los 6.000 euros sobrepasa el 16 por ciento; y entre 6.000 y 12.000 euros es casi de un 26 por ciento. Además, la tasa de paro entre los titulados universitarios de entre 25 y 34 años es aproximadamente del 11 por ciento, uno da las más altas de Europa, donde la media de desempleo para este sector de edad es del 6,5 por ciento. Según las estadísticas del Instituto de Juventud, el 30 por ciento de los jóvenes entre 30 y 35 años vive aún con sus padres. La cifra se incrementa hasta el 63 por ciento para los jóvenes entre los 25 y los 29 y hasta el 95 por ciento entre los 18 y 25 años. El problema de la vivienda les afecta. Este prototipo de joven vive generalmente en ciudades, en las cuales el alquiler y el precio de los pisos es desproporcionado. Se deduce que destina un tercio o más de su sueldo al alquiler. Por lo tanto, los que llegan a ganar 1.000 euros gastan aproximadamente 350 euros de alquiler y en una casa compartida, a lo que hay que sumar al menos 50 euros de gastos de vivienda, 200 euros en alimentación y 100 de transporte como mínimo (algo más lo que tienen coche propio y deben mantenerlo). Por ello, les quedan 300 euros para repartir entre otros gastos básicos: ocio (gimnasio, clases de idiomas, salir…) vestido y calzado, facturas... Lo de ahorrar es algo que por ahora tendrán que olvidar.