CHILE

Bachelet exige la dimisión de cuatro ministros para solucionar la crisis

Por Marta Aguilera Jiménez2 min

Internacional01-04-2007

En mitad de la crisis generada por la implementación de un nuevo plan de transporte público en la capital de Chile, su presidenta, Michelle Bachelet, pidió la renuncia de los ministros de Defensa, Justicia, Transportes y Secretaría General de Gobierno el pasado martes. Según fuentes del Gobierno, Bachelet tomó esta decisión porque “las cosas no se han hecho bien”.

En un discurso leído en el Palacio de la Moneda, Bachelet anunció medidas para terminar con los problemas generados por el plan Transantiago, el más importante cambio en el sistema de movilización colectiva en 60 años. Además, es que el que ha generado los problemas más graves desde su puesta en marcha, el pasado 10 de febrero, debido a la falta de autobuses, fallos en los recorridos urbanos y en la aplicación del diseño original, que buscaba terminar con la congestión y bajar los índices de contaminación ambiental. La presidenta solicitó la dimisión a los ministros de Transportes, Sergio Espejo; de Justicia, Isidro Solís; de Defensa, Vivianne Blanlot, y de la Secretaría General de la Presidencia (que coordina la relación entre el Gobierno y el Parlamento), Paulina Veloso. Serán reemplazados por René Cortázar, Carlos Maldonado, José Goñi Carrasco, y José Antonio Viera-Gallo, respectivamente. Otra de las decisiones de la presidenta fue la de designar un nuevo ministro de Energía, Marcelo Tokman, separando esta Cartera de la de Minería, que seguirá a cargo de Karen Poniachik; y la de nombrar como ministra para el recién creado Ministerio de Medio Ambiente a Ana Lya Uriarte. Disculpas a la población “No es común que un presidente se pare frente a la nación y diga: aquí las cosas no se han hecho bien”, dijo Bachelet. “No es explicable que un sistema de transporte hecho para integrar mejor a la ciudad esté siendo una fuente de dificultades y de discriminación. Y eso no lo voy a tolerar”, señaló enérgicamente haciendo referencia a los problemas que ha traído consigo para la población el plan Transantiago. Aseguró que, como presidenta, se hace cargo “de la responsabilidad gubernamental en las deficiencias de la puesta en marcha de Transantiago, como de los problemas relacionados con su propio diseño”. Bachelet continuó confesando que se siente cercana y conmovida por los que sufren y por los más necesitados: “por eso me ha dolido profundamente lo que ha pasado en estos días, y que ha golpeado con más fuerza a los más pobres de nuestro país y de Santiago, porque nadie se merece estas penurias”. Finalmente, la jefa de Gobierno chilena comprometió todos sus esfuerzos en solucionar los problemas y dijo que su Gobierno seguirá trabajando con fuerza para sacar adelante al país.