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LIBERTAD DURADERA

El avance de la Alianza del Norte acorrala a Bin Laden

Por Vicente García GandíaTiempo de lectura2 min
Internacional25-11-2001

El avance de las tropas de la Alianza del Norte deja cada vez menos margen al líder terrorista Osama Bin Laden, cuyo paradero sigue siendo una incógnita para Estados Unidos y sus aliados.

Estados Unidos vigila al líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden. El avance de las tropas de la Alianza del Norte, que la semana pasada tomaron la mayor parte del territorio de Afganistán, deja al multimillonario saudí cada vez con menos margen de maniobra. A pesar de que los talibán afirman haber perdido cualquier tipo de contacto con Bin Laden desde la toma de Kabul por tropas de la Alianza del Norte, los estadounidenses confían en que el enemigo público número uno continúa en el país. La geografía afgana está dificultado las labores de búsqueda por parte de EE.UU. Para intentar localizar a Bin Laden, los estadounidenses emplean su tecnología vía satélite, capaz de encontrar un blanco en cualquier rincón del planeta con definiciones inferiores a un metro y sensores que pueden detectar el aliento de una persona a 30 metros de profundidad. Además de la tecnología espacial, la primera potencia mundial emplea métodos más tradicionales: los bombardeos aéreos, 50.000 soldados de la oposición anti talibán y cazadores de recompensas, que persiguen el dinero ofrecido por EE.UU. Pese a que las tropas del mulá Omar (el líder talibán) han perdido dos terceras partes del territorio de Afganistán y a la información facilitada por los comandantes talibán, que se rinden a los soldados de la oposición y se venden a agentes de la CIA, la escarpada geografía de la zona y la facilidad de movimientos de la que disfruta Bin Laden, hacen que todavía escape a la persecución estadounidense. Los satélites estadounidenses no pueden detectar sus movimientos a menos que se hagan en grandes caravanas, por lo que el uso de animales como transporte sirve para ocultar al líder terrorista. Además, Bin Laden ha ordenado a sus fieles que le den muerte, antes de caer prisionero de los estadounidenses.