Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

ETA

La Fiscalía retira los cargos contra Otegi en contra del tribunal

Fotografía Otegi escucha al juez dejarle en libertad tras la decisión del fiscal

Otegi escucha al juez dejarle en libertad tras la decisión del fiscal

Por Antonio PérezTiempo de lectura3 min
España23-03-2007

El fiscal Fernando Burgos retiró la acusación presentada contra el portavoz de Batasuna tras considerar que no había cometido ningún delito de enaltecimiento del terrorismo. Una postura que choca con la del tribunal de la Audiencia Nacional que lo juzgaba, que sí que vio indicios de delito para procesarle.

Al final, el representante de Batasuna, Arnaldo Otegi, fue juzgado por la Audiencia Nacional. Después de las peticiones de la Fiscalía para retrasar el juicio, que fueron desestimadas, Otegi tuvo que presentarse en Madrid ante la Sección Cuarta de lo Penal para ser juzgado por un presunto delito de enaltecimiento del terrorismo durante los actos de un homenaje a la etarra Olaia Castresana, que falleció mientras manipulaba un artefacto explosivo en julio de 2001. En líder abertzale, que por aquel entonces tenía condición de parlamentario, alabó la entrega de los gudaris (soldados) vascos en la lucha, un hecho que supuso que se investigara acerca de si esas declaraciones eran constitutivas de delito. La Fiscalía pedía para Otegi el ingreso en prisión durante 15 meses en un principio, aunque finalmente retiró la acusación después de que Otegi respondiera a las preguntas del fiscal de la Audiencia Nacional, Fernando Burgos, y concluyera que no había habido delito en su conducta. La decisión de la Fiscalía llegó más tarde de lo habitual, ya que Otegi no compareció a la hora en que estaba previsto el juicio. Debido, según alegó, a las dificultades en la carretera por el mal tiempo, el portavoz de Batasuna decidió volver a su casa en Elgoibar (Guipúzcoa). La Audiencia Nacional, después de consultar con la Dirección General de Tráfico, consideró injustificada la actitud de Otegi y ordenó el arresto del acusado, que fue detenido en su casa por la Guardia Civil y trasladado a Madrid en un avión de la Policía Nacional. Ante la Audiencia Nacional, negó haber realizado actos de enaltecimiento de terrorismo y defendió que sólo expresó ideas relacionadas con el derecho de autodeterminación del País Vasco. Finalmente, la Fiscalía retiró los cargos y el juez puso en libertad a Otegi, que ya había sido juzgado por el Tribunal Superior del País Vasco por esos hechos en marzo de 2004 junto a Jon Salaberria, que fue absuelto. La Fiscalía cree que el tribunal tuvo una "pataleta" A pesar de la actitud de la Fiscalía, el tribunal que juzgó a Otegi afirmó en la sentencia que había una prueba de cargo “directa, objetiva, suficiente para desvirtuar la presunción de inocencia” del líder abertzale y que no se le había podido procesar porque el único denunciante, la propia Fiscalía, había retirado la denuncia. Por su parte, la Fiscalía tildó de “pataleta infantil” la actitud del tribunal y consideró un “teatro vergonzoso” la jornada de juicio a Otegi. Estas valoracione incrementaron ún más la polémica sobre el papel de la Fiscalía a la hora de juzgar al entorno de ETA y de Batasuna, ya bastante caldeado con la atenuación de la prisión para el etarra De Juana Chaos. Desde el Partido Popular, consideraron que se había “humillado” a la democracia en un acto “tan grave o peor” que el de la decisión con De Juana Chaos. Algo compartido también por el Foro de Ermua y otros colectivos como ¡Basta ya!, que se manifestaron en el Paseo de la Castellana en Madrid para criticar la decisión de la Fiscalía. Este caso no es el primero en el que la conducta de Otegi y de la Fsicalía causa sorpresa. Ya en mayo de 2005, mientras estaba siendo juzgado por el juez Fernando Grande-Marlaska por su actuación pública al frente de una formación ilegalizada, Otegi preguntó si el Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido, estaba al corriente de que la petición de la fiscalía, que solicitaba prisión incondicional para el acusado.