LIBERTAD DE PRENSA
La APM denuncia los ataques a la prensa mientras sigue la ola de secuestros
Por Marta Borrachero Villar
2 min
Comunicación12-03-2007
El Comité de Protección de los Periodistas (CPJ) denunció el pasado 6 de marzo la imparable matanza de reporteros en zonas en conflicto, la censura creciente en estados considerados democráticos y "la amenaza" bajo la que aún viven algunos profesionales en España. Un día después de estas declaraciones, un periodista italiano de La Reppublica, Daniele Mastrogiacomo, fue secuestrado en Afganistán.
La falta de libertad de expresión es una traba con la que se encuentran muchos periodistas y corresponsales de todo el mundo. Los informadores son el blanco de los secuestradores. La última víctima es Daniele Mastrogiacomo, periodista de La Reppublica, que fue retenido por unos talibanes el pasado 7 de marzo. Éstos han pedido a cambio de su liberación que el Gobierno italiano retire sus tropas de Afganistán. De momento, nada se sabe del estado de salud del informador. Por su parte, el CPJ denunció que en el año 2006 perdieron la vida 55 periodistas en el ejercicio de su profesión. De todos ellos, 32 perecieron en Irak, y treinta de éstos eran iraquíes. Además, 134 periodistas fueron encarcelados, 9 más que en 2005. La mayoría eran profesionales que trabajan en medios de Internet y que fueron detenidos al ejercer el derecho a la libertad de información, según indicó Joel Simon, director ejecutivo del CPJ, al presentar el informe en la Asociación de la Prensa de Madrid. De todos los países, China es el que encabeza la lista, con 31 periodistas encarcelados. Además, Simon cree “que puede aumentar de cara a la celebración de los Juegos Olímpicos de Pekín”. Sobre el estado de la libertad de prensa en España, Simon indicó que el CPJ reconoce que no se han registrado ataques a periodistas en los últimos años. Sin embargo, "conocemos que aún viven bajo amenaza algunos periodistas de este país, especialmente en el País Vasco" Según el informe, la peores vulneraciones de la libertad de prensa se producen en Corea del Norte, Birmania, Turkmenistán, Guinea Ecuatorial, Libia, Eritrea, Cuba, Uzbekistán, Siria y Bielorrusia. Simon también quiso denunciar la "nueva ola de líderes autocráticos", elegidos democráticamente, pero que "no respetan las instituciones democráticas", y se refirió en concreto al presidente ruso, Vladímir Putin, y al venezolano, Hugo Chávez. El informe destaca los asesinatos de periodistas rusos, como fue el caso de Anna Politkovskaya, y califica a Rusia como el Estado que ostenta "el peor récord de impunidad (sobre la solución de esas muertes) entre los países de la región", donde en los últimos 15 años fueron asesinados 46 periodistas. Joel Simon también ha dedicado especial atención a la violencia que existe en muchos países y que coartan la libertad de expresión. Uno de los casos más alarmantes es el de Méjico, donde las bandas de delincuentes y la mafia dedicada al contrabando ejercen una gran presión en la prensa.