CIENCIA-ÉTICA
El número de abortos crece progresivamente en España
Por Cristina Arias 
2 min
Sociedad25-02-2007
En 1985 entró en vigor en España la Ley de interrupción voluntaria del embarazo y, aunque todavía hay opiniones confrontadas, las estadísticas oficiales muestran un aumento progresivo de casos.
Durante los últimos años, las leyes referentes al aborto se han liberalizado en muchos países con el argumento de combatir los altos índices de abortos ilegales y como reconocimiento del derecho que tienen las mujeres de gobernar su reproducción. A mediados de 1982 el 10 por ciento de la población mundial vivía en países donde la práctica del aborto estaba prohibida, un 18 por ciento en países donde sólo estaba permitido para salvar la vida de la mujer, un 8 por ciento en lugares donde se consentía sobre bases médicas amplias y el resto de la población -64 por ciento- estaba gobernada por leyes que lo aprobaban por razones sociales y económicas o por petición propia. En España el aborto queda despenalizado a partir de 1985 cuando, de la mano del Partido Socialista, se reforma el Código Penal para incluir -por primera vez- una Ley de interrupción voluntaria del embarazo que contempla tres circunstancias posibles: que sea necesario para evitar un grave peligro para la vida o la salud física o psíquica de la embarazada, que el embarazo sea consecuencia de un delito de violación y éste haya sido denunciado o que el feto tenga graves lesiones físicas o psíquicas que dificulten su vida. En el caso de las violaciones el aborto debe practicarse en las primeras 12 semanas de gestación y en el caso de malformaciones del feto está permitido hasta la semana 22. Sin embargo, se ha señalado a menudo que, la situación legal del aborto no es una indicación verdadera de su práctica o disponibilidad ya que en algunas ocasiones se realizan abortos que no pertenecen a ninguna de las tres circunstancias establecidas. Según el Ministerio de Sanidad, más de 33.000 adolescentes y jóvenes de entre 15 y 24 años decidieron abortar en 2004. Estos datos, pertenecientes a estadísticas oficiales, muestran el progresivo aumento de las interrupciones voluntarias del embarazo en los últimos años en España. Así, mientras que en 1995, la tasa de abortos por mil habitantes entre las menores de 20 años llegaba al 4,51, en 2004 esta cifra se duplicaba hasta alcanzar el 10,35. En cuanto a las jóvenes de entre 20 y 24 años, el porcentaje es casi el doble, pasando del 8,16 de 1995 al 15,37 de 2004. Respecto a las menores de edad, los informes subrayan que en los últimos diez años se han duplicado el porcentaje de abortos. España tiene en la actualidad una tasa de abortos de 9 casos por cada mil mujeres. En comparación con el resto de países de la Unión Europea, la tasa más baja corresponde a Bélgica, los Países Bajos y Alemania (7/1000 mujeres), el grupo intermedio lo forman Finlandia, Francia e Italia (12/1000 mujeres), los niveles más altos se encuentran en Suecia, Reino Unido y Dinamarca (17/1000 mujeres).