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CATALUÑA

Montilla presenta su nuevo tripartito entre el cambio y el continuismo

Por Nacho Ferández Gutiérrez Tiempo de lectura3 min
España03-12-2006

"Asumo esta responsabilidad con la conciencia de ser el depositario de un legado al servicio del pueblo de Cataluña". "Reconozco el profundo sentido histórico de la autoridad institucional que me ha sido conferida”. Con estas palabras asumió José Montilla el cargo de presidente de la Generalitat durante su discurso de toma de posesión.

“Asumo la responsabilidad con el convencimiento de que mis acciones y actitudes y las de mi Gobierno irán encaminadas a convertir esta autoridad institucional en liderazgo del país", añadió. Montilla, primer presidente no oriundo de Cataluña, asumió la nueva responsabilidad "como el más humilde de los servidores del pueblo de Cataluña". El anterior tripartito de Maragall no alcanzó a cumplir la legislatura completa y en las anticipadas elecciones del pasado noviembre Artur Mas, alma culminadora del 'Estatut' tras su pacto con el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero en la Moncloa, vio como se producía la reedición del gobierno tricéfalo formado por PSC, ERC e ICV. De este modo, será José Montilla quien gobierne legítimamente con los votos del nuevo tripartito denominado de Entesa. En la composición de este recién nacido ejecutivo catalán mandan los socialistas. Al presidente le acompañarán siete consejeros de su partido: Joaquim Llena en Agricultura; Ganadería y Pesca; Ernest Maragall en Educación; Antoni Castells en Economía, Montserrat Tura que pasa de Interior a Justicia; Joaquim Nadal en Política Territorial y Obras Públicas; Marina Geli en Salud y Mar Serna Calvo en Trabajo. De esta manera los consellers nombrados por Maragall Carme Figueras, Xavier Sabaté, Ferran Mascarell, Jordi Valls, Jordi William Carnes y Joan Manuel del Pozo dicen adiós a sus carteras. Por su parte, ERC ha salido reforzada en el nuevo reaparto. Así, Josep Lluís Carod-Rovira ostentará la Vicepresidencia y Joan Puigcercós, abandona su puesto de portavoz parlamentario para encargarse de Gobernación. El resto son Carme Capdevila, en Bienestar; Josep Huguet, en Industria, y Joan Manuel Tresserras, en Cultura y Comunicación. En lo que respecta al tercer miembro de la Entesa, ICV-EUiA, Joan Saura ocupará Interior y Relaciones Institucionales, -lo que ha suscitado polémicas discusiones en el seno del PSC-, y Francesc Baltasar, Medio Ambiente y Vivienda. Sin duda ERC, ahora con más poder que en el anterior gobierno, retomará la batalla estatutaria, pues quedó a disgusto con el Estatuto pactado por Mas y Zapatero. Aun así, el nuevo Gobierno tiene otras ambiciones. Este organigrama de la Generalitat crea dos macro-áreas económicas; una bajo el mando del conseller socialista Antoni Castells, que asumirá el impulso de lainterconexión eléctrica al incorporar Energía a Economía y Finanzas, y la otra bajo el mando del conseller republicano Josep Huguet, que dirigirá un departamento que engloba Industria, Comercio, Turismo, Universidades e Investigación. También se ha producido el cambio de nombre de seis departamentos y la creación de dos consellerías nuevas. En concreto, se crea el "departamento del vicepresidente" y el de Innovación, Universidades y Empresa. La paridad impuesta en Moncloa no es algo de lo que se haya tomado nota en Cataluña. Sólo cuatro mujeres ostentan una consellería frente a once hombres. La voluntad real de Montilla es la de pasar página. No quiere ser comparado con el carismático Maragall. Pero será difícil evitarlo. Cuenta con Saura y Rovira, las mismas cabezas que acompañaron a su antecesor, los consellers Castells, Baltasar, Geli y Nadal repitan y, algo que no puede pasarse por alto, el hermano de Maragall está en el gobierno. Continuista o no, Montilla quiere su propio proyecto. Lo quiere bien atado a su mano y ha sabido ser generoso con sus socios. Ahora sólo cabe esperar.