MÉXICO

Calderón consigue finalmente la victoria en las presidenciales mexicanas

Por Berta Pardal1 min

Internacional10-09-2006

Felipe Calderón fue declarado ganador de la elección presidencial de México esta pasada semana. Después de semanas de protestas, manifestaciones y amenazas de boicot, el Tribunal Electoral ratificó su victoria de manera unánime. Su primer discurso se basó en asentar las bases de lo que pretende hacer por el país y dejó claro que “si algo demanda acción urgente y todo el poder del Estado mexicano es encargarse de las millones de familias que aún viven en la pobreza”.

Calderón ya ha expuesto las que a su juicio son las necesidades de México y las soluciones que propone como presidente, mientras su oponente mantiene sus consignas. Esto podría llevar a México a una prolongación de la crisis política puesto que muchos de los que votaron por López Obrador se están cansando de su intento de revertir los resultados de una elección que según las investigaciones fue claramente libre e imparcial. Por su parte el principal partido de izquierda mexicano mantiene que perdió las elecciones por fraude. Obrador, el líder izquierdista, asegura que si no logra sabotear la investidura del presidente electo hará todo lo posible para “que caiga” su Gobierno. Como parte de una resistencia civil en protesta por el supuesto fraude electoral convocada por el ex candidato, izquierdistas tratarán de impedir la toma de cargo del nuevo mandatario en el Congreso el próximo primero de diciembre. Según el portavoz del Partido de la Revolución Democrática (PRD), la estrategia podría ser similar a la que usaron los legisladores de izquierda que tomaron el pasado primero de septiembre el estrado del Congreso para impedir al presidente saliente, Vicente Fox, leer su último informe anual de Gobierno. El pasado miércoles, cientos de seguidores de López Obrador protestaron lanzando huevos afuera del tribunal electoral, donde le fue entregada a Calderón la constancia de su victoria en las elecciones del pasado 2 de julio. Pero los campamentos urbanos de "resistencia civil pacífica" de la izquierda mexicana están estos días más tranquilos debido a la confirmación de la presidencia de Felipe Calderón. Los 48 campamentos instalados en el Centro Histórico y el Paseo de la Reforma cuentan cada vez con menos manifestantes. Los primeros signos de que la protesta se debilitaba aparecieron tras las primeras semanas de resistencia en los ocho kilómetros del Paseo de la Reforma.