CINE

Joaquín Jordá y Geraldine Chaplin, premiados

Por Eduardo Iglesias1 min

Espectáculos06-07-2006

En una misma semana se han conocido los premiados por dos de las galardones institucionales más importantes del cine español. El Ministerio de Cultura, a través del Instituto de Cinematografía y Artes Audiovisuales (ICAA), otorga su Premio Nacional de Cine 2006 a Joaquín Jordá, director de cine de ficción documental. El premio llega de manera póstuma por su reciente muerte. Por otro lado, la Academia de Cine reconoce la importantísima carrera de Geraldine Chaplin y le regala su Medalla de Oro.

El premio le llega lamentablemente un poco tarde a Joaquín Jordá, fallecido el 23 de junio. No obstante, no se debe considerar el galardón como un homenaje póstumo, puesto que estaba propuesto para él antes de su fallecimiento. Es, por tanto, un reconocimiento de la importante carrera como director y guionista de este catalán. Su aportación es especialmente importante como uno de los hombres clave de la Escuela de Barcelona -corriente renovadora del cine nacional en los 60 y 70- y como director de documentales, con ejemplos como Numax presenta y Monos como Becky. Como guionista había escrito el libreto de Cambio de sexo y El Lute: camina o revienta, de Vicente Aranda. El otro galardón anunciado esta semana, la Medalla de Oro de la Academia, es para la norteamericana, aunque imprescindible del cine español, Geraldine Chaplin. Hija de Charles Chaplin y nieta de Eugene OŽNeill, ha trabajado en cine estadounidense, francés y español. Después de su debut en Candilejas tuvieron que pasar algunos años hasta que con Doctor Zhivago logró reconocimiento internacional. Pero en lugar de seguir fiel a Hollywood probó fortuna en filmes minoritarios y extranjeros que le interesaban más. Su trabajo de años da como resultado sus cintas con Robert Altman, Jacques Rivette y Carlos Saura -de quien fue pareja durante años-. Su última década, con mucha actividad en España, le han permitido trabajar en filmes como Hable con ella, de Almodóvar, y En la ciudad sin límites, de Antonio Hernández.