ALEMANIA 2006

España y Argentina presentan sus credenciales a Brasil

Por Alejandro G. Nieto5 min

Deportes23-06-2006

La primera fase del Mundial de Alemania 2006 destacó por el pobre juego ofrecido por la mayoría de los favoritos. Alemania, Inglaterra, Italia y Brasil se clasificaron para octavos sin problemas pero sembraron muchas dudas sobre sus posibilidades. En cambio, España y Argentina encandilaron a toda la comunidad futbolística con un juego de toque, goleadas memorables y juventud y descaro en sus jugadores. Las sorpresas corrieron a cargo de Ecuador, Ghana y Australia.

Grupos A y B En el grupo A, Alemania no deslumbró con su juego pero pasó como una apisonadora sobre todos sus rivales. En el partido inaugural, Costa Rica fue una marioneta en manos de los teutones, a los que les bastó su buena pegada. Polonia, sin embargo, se mostró más correosa, pero sin la calidad suficiente para inquietar una selección de renombre. Costarricenses y polacos se quedaron fuera a las primeras de cambio, si Alemania no perdonó, Ecuador sorprendió con un juego vistoso y efectivo que le reportó dos victorias de mérito. Luego Alemania impuso su experiencia y le . Algo similar le sucedió a Inglaterra en el grupo. Aunque, en este caso, una sorprendente Trinidad y Tobago rivalizó hasta el último momento con Suecia por la segunda plaza. Los ingleses, con un juego excesivamente vertical y previsible, sufrieron contra una floja Paraguay y también con los trinitenses, a los que se impusieron con más pena que gloria. Suecia, finalmente segunda, tuvo momentos de buen fútbol, sobre todo en el último partido contra Inglaterra, pero su exceso de confianza contra los dos rivales de menor entidad pudo costarle caro. Grupos C y D El grupo de la muerte dejó un par de exhibiciones de Argentina, que pasó apuros contra una atrevida Costa de Marfil y humilló a Serbia y Montenegro. Africanos y balcánicos hicieron las maletas tras perder también contra Holanda, que no rindió al nivel esperado pero supo explotar la definición de sus hombres de ataque. El partido por el primer puesto entre albicelestes y naranjas fue un mero trámite que salió beneficioso para los argentinos. Portugal tampoco jugó al nivel que prometían con rivales tan débiles. Angola, cuyo portero se destapó como uno de los mejores del Mundial, vendió cara su derrota y pudo arrebatarle la segunda posición a México. Los aztecas decepcionaron con su juego, salvo en el partido contra Portugal, lo que desató las críticas contra el entrenador. Irán, a excepción del empate contra México, fue un mero combidado de piedra. Grupos E y F El grupo E estuvo marcado por la igualdad. Italia sacó provecho de su mayor calidad contra Ghana, al igual que la Republica Checa, que deslumbró contra Estados Unidos. Pero la rebelión de las dos cenicientas del grupo en la segunda jornada contra unos rivales muy rácanos y dejaron abierta una vía para la sorpresa. Así, los ghaneses impusieron su físico y dejaron fuera a los checos, que no encontraron su juego contra Italia. Brasil fue, de largo, la gran decepción de la primera fase, pese a llegar con la vitola de favorito. Sus estrellas no rindieron al nivel esperado ni contra Croacia ni contra Australia, que merecieron más por juego y trabajo. Japón presentó batalla y demostró algo de calidad, aunque sólo pudo arañar un punto. Los aussie se erigieron en los protagonistas –quedó patente la buena mano de Guus Hiddink–, mostraron buenos argumentos y dejaron fuera a Croacia, que lastró la inexperiencia de sus jugadores clave pero demostró tener asegurado un buen equipo para el futuro. Grupos G y H A Francia le pesaron los años y el bajo estado de forma de su estilete Thierry Henry. Suiza, que le causó muchos problemas, demostró haber formado un grupo compacto y con calidad, aunque limitada, en todas sus líneas. También dejaron una buena impresión Corea del Sur y Togo, aunque los africanos se quedaron fuera en el segundo partido por su falta de pegada. Los sur coreanos, un equipo físicamente impecable, demostraron lo difícil que es doblegarles y dominaron el grupo hasta el último partido. Sin embargo, en la jornada decisiva sucumbieron contra Francia, de modo que los bleus, por detrás de Suiza, consiguieron pasar a octavos de final. Los galos se medirán contra una España convertida en una de las atracciones del Mundial desde el primer día. Su juego, basado en la posesión del balón y la movilidad de sus jugadores, maravilló desde el principio, con una exhibición en la goleada a Ucrania, y después con una remontada de mérito contra Túnez. Aunque en el tercer partido, con la clasificación conseguida, los suplentes no aprovecharon la oportunidad de reivindicarse y dejaron una pobre imagen contra Arabia Saudí, el equipo más débil del grupo. Ucrania y Túnez mostraron muchas limitaciones, aunque la mayor calidad y experiencia de los europeos bastó para conquistar la segunda plaza.