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TERRORISMO

La Guardia Civil desarticula la cúpula del GRAPO

Por Alejandro RequeijoTiempo de lectura1 min
España09-06-2006

Mientras el debate político se focaliza casi en exclusiva en torno al fin de ETA, otra banda terrorista histórica, el GRAPO, sufrió una operación policial que podría suponer al final de sus actividades. Efectivos de la Guardia Civil detuvieron al presunto líder y a otros dos miembros de la organización.

El jefe es, Juan García Martín y las otras dos arrestadas son María Aránzazu Díaz y Carmen Cayetano Navarro. Los tres formaban la cúpula de la banda y fueron detenidos en Reus (Tarragona) en el piso en el que vivían. La operación estaba dirigida por la Audiencia Nacional. En el piso-franco se encontró abundante documentación y tres ordenadores pero no armas. Los efectivos del Instituto Armado analizan estas pruebas así como tres teléfonos móviles encontrados con el objetivo de conocer la infraestructura de la banda y el lugar en el que esconden el armamento. Juan García Martín ya fue condenado en 1978 a 20 años de prisión por pertenencia a banda armada. Una vez abandonó la prisión se reincorporó al GRAPO. Se le relaciona con la línea más dura de la organización y desde el año 2004 pesaba sobre él una orden de detención internacional impuesta por el juez Baltasar Garzón. Entre las acciones criminales más destacadas del GRAPO en los últimos tiempos figuran el asesinato de la esposa de un empresario y el intento de atraco a una sucursal bancaria. Ambas operaciones tuvieron lugar este año y es que tras su última desarticulación, hace cuatro años, los terroristas se habían reforzado hasta el punto de tener capacidad para efectuar acciones con “fines económicos”, según los investigadores. Es la tercera vez en seis años que se realiza una operación que termina con la cúpula terrorista entre rejas.