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FRANCIA

El ‘caso Clearstream’ pone a la Presidencia y al Gobierno en entredicho

Fotografía
Por Salva Martínez Más.- PARÍSTiempo de lectura2 min
Internacional07-05-2006

Las revelaciones sobre el papel que han jugado el presidente francés, Jacques Chirac, y su primer ministro, Dominique de Villepin, en el caso Clearstream afectan muy negativamente a la imagen de las instituciones políticas francesas más importantes. Frente a la crisis, De Villepin y Chirac hacen piña.

El rotativo Le Monde publicaba, hace dos semanas, parte de la declaración judicial del general y ex agente secreto Phillipe Rondot acerca del denominado caso Clearstream. A partir de ese día, la política y los medios de comunicación franceses se mueven al ritmo de las revelaciones y las pesquisas de los jueces que investigan las cuentas secretas de la sociedad financiera luxemburguesa que da nombre al caso que tienen entre manos los magistrados Jean-Marie d'Huy y Henri Pons. No es para menos, la cúpula política del país, tanto la Presidencia como el Gobierno, podría haber cometido espionaje con la intención de acabar con la buena estrella política de Nicolás Sarkozy, el ministro del Interior, presidente del partido gubernamental, Unión por un Movimiento Popular (UMP) y abiertamente declarado candidato a las elecciones presidenciales de 2007. Al menos esto es lo que dan a entender las informaciones sobre el ya denominado affaire d'Etat. Un documento hecho público por el rotativo prevalece. Se trata de las notas que tomó Rondot el 9 de enero de 2004 cuando se reunió con De Villepin, ministro de Asuntos Exteriores por aquel entonces. Según la versión de los hechos publicada, en esa cita Rondot recibió la orden del que fuera jefe de la diplomacia gala, actuando éste bajo órdenes de Chirac, de investigar la veracidad de una lista de personas ligadas a la sociedad financiera Clearstream tras haber ingresado ahí dinero recibido de sobornos, y entre las que se encontraba, claro está, Nicolás Sarkozy. En la reunión Rondot apuntaba: "Asunto político: N. Sarkozy. Fijación sobre N. Sarkozy (referencia: conflicto J. Chirac / N. Sarkozy ). Una prueba que, como el resto de las que ha revelado desde finales de abril Le Monde, el primer ministro no acepta, y de ahí que las haya llegado a negar hasta en cuatro ocasiones durante la semana pasada. La insistencia con la que niega Dominique de Villepin es similar al insistente apoyo de Chirac a su primer ministro y presumible delfín para las elecciones de 2007. Este jueves Nicolás Sarkozy acudirá a declarar ante los jueces d'Huy y Pons para facilitar a los magistrados a llegar al fondo de la cuestión, con lo que a la oposición se le presenta una segunda semana en la que la llaga política del caso Clearstream sigue abierta. Meterá los dedos, eso es seguro. La semana pasada ya se escuchó al secretario general del partido socialista, François Hollande, invitar a Chirac a que "cambie de gobierno".