CONSECUENCIAS

Tensiones en el mercado por el encarecimiento del crudo

Por Elena De Román Martín3 min

Economía15-04-2006

El barril de crudo tipo Brent, de referencia en Europa, ha llegado esta semana a rozar la barrera de los 70 dólares, con su marca en los 69,97 dólares por barril, un nuevo máximo según datos del International Petroleum Exchange (IPE). Con este precio final, el barril de Brent para entregar en mayo ha subido casi un uno por ciento.

Mientras, en Norteamérica, el West Texas Intermediate, la referencia en Estados Unidos, también se ha disparado y ha alcanzado su nivel máximo en los dos últimos meses. Estos datos están haciendo temer que la capacidad de refino del sector petrolero no sea suficiente para atender la fuerte demanda de energía este verano. Una de las principales causas de este espectacular aumento en el precio del petróleo se debe a las noticias que están surgiendo sobre un supuesto plan de Estados Unidos para atacar Irán y poner fin a su polémico programa nuclear. No obstante, la Administración de Bush lo ha negado y ha afirmado que tratará de solucionar el problema iraní mediante la diplomacia. Irán es el cuarto productor mundial de petróleo y el segundo dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), por detrás de Arabia Saudí. A esto hay que añadir la violencia en Nigeria -miembro también de la OPEP-, con interrupciones en el suministro que paralizan el bombeo de un tipo de crudo muy apreciado por su bajo contenido en azufre, y las complicaciones de las refinerías del Golfo de México para responder a la fuerte demanda estacional. De momento, ya se están empezando a notar este encarecimiento del crudo y, coincidiendo con las vacaciones de Semana Santa, las compañías aéreas Iberia, Spanair y Air Europa y la aerolínea del grupo Globalia han anunciado un aumento de sus tarifas al introducir una subida del recargo por combustible en las rutas nacionales, y no sólo en los vuelos internacionales, con el objetivo de paliar el impacto de la apreciación del petróleo. Esta subida de tarifas ha sido calificada por la Federación de Consumidores en Acción (Facua) de “brutal e injustificada”. Tijeretazo de la UE a Repsol Mientras, Repsol, a instancias de la Comisión Europea (CE), ha accedido a liberar centenares de estaciones de servicio de los contratos de suministro exclusivo a largo plazo que mantenía con ellas. Con esta decisión, la CE ha cerrado la investigación que había abierto para averiguar si la petrolera hispano-argentina cumplía con las normas de la competencia. Repsol se ha comprometido, además, a no firmar ningún nuevo contrato de suministro exclusivo de una duración superior a cinco años, se abstendrá de comprar estaciones de servicio a las que no proporcione sus productos y dará a las integradas en su red una total libertad para ofrecer descuentos en los precios minoristas. En caso de incumplimiento, se le multará hasta con un 10 por ciento del volumen total de negocios de la empresa. Con estas medidas, “el consumidor gozará de mayor elección y precios más bajos”, ha asegurado la CE. Sobre dichos compromisos, todas las estaciones a las que rescinda su contrato deberán de compensar a la petrolera; algo que, según la Agrupación Española de Vendedores al por Menor de Carburantes y Combustibles (Aevecar), debe aclararse cuanto antes ya que, según su secretario general, Alejandro Montilla, no se “ha concretado durante cuanto tiempo habrá que pagar esta compensación económica”.