EMPRESAS
La fabrica Sanyo de Tudela cerrará el próximo 31 de marzo
Por Laura Martínez
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Economía11-02-2006
La entrada de productos procedentes de países con menores costes de producción ha sido la principal causa por la que la empresa japonesa Sanyo va a cerrar su planta en Tudela (Navarra), con el consiguiente despido de 176 personas. El comité de empresa de Sanyo en Tudela no tiene ninguna duda de que la planta será clausurada el próximo 31 de marzo, ya que en esa fecha concluye la producción asignada.
El presidente de la multinacional en España, Etsuo Shintaku, informó al comité de empresa que su división industrial en España ha quedado fuera de una alianza con una multinacional china, así como las divisiones de Investigación y Desarrollo (I+D) y compras del centro que Sanyo posee en Barberà, en las que trabajan 22 empleados. La compañía señala que el entono comercial es “cada vez más severo y competitivo” debido a la entrada de productos más baratos procedentes de países con menos costes de producción, lo cual ha desatado “una intensa guerra de precios”. La última ampliación del mercado, con nuevas marcas y con el consiguiente descenso de precios de entre el 40 y el 50 por ciento, ha causado una importante pérdida de la competitividad de los productos fabricados en Tudela, sobre todo en los televisores de tubo catódico y, desde mayo de 2005, en aparatos de cristal líquido (LCD). “Sanyo no ha estado a la altura y esta situación motivó que buscara un fabricante de pantallas para coligarse en el negocio de televisores. La firma asiática interesada, cuyo nombre no ha trascendido, quiere prescindir de la planta de Tudela”, ha explicado la presidenta del comité de empresa, Ana María Ruiz. La compañía ya ha iniciado las negociaciones con los comités de empresa y empleados de los centros afectados para llegar a un acuerdo y proceder al cierre de la división industrial “en las mejores condiciones para todos”. Mientras tanto, los sindicatos han convocado para el 18 de febrero una manifestación contra el cierre y han solicitado una reunión con el consejero de Industria del Gobierno de Navarra, José Javier Armendáriz, para que medie en busca de las mejores opciones alternativas.