INCIDENTES DE JUN

Okupas por una semana

Por Laura Ferrera2 min

España05-11-2005

Jun, un pueblo granadino de 2.500 habitantes pasó a la primera plana informativa después de que varias familias de etnia gitana ocuparan tres edificios de esta localidad.

Pero la historia va más lejos, ya desalojados los okupas se sigue investigando si fue un asalto organizado y si detrás de todo se encuentran intereses de especulación del suelo. “Todo el mundo tiene derecho a una vivienda digna” alegaban las familias gitanas que ocuparon las casas del Jun. Algunos pisos estaban vacíos pero otros llevaban años habitados, aunque esto no fue impedimento ya que los okupas les echaron a la fuerza de sus casas, según la versión del Alcalde de la localidad. El Alcalde también relataba que se han quedado sin casa 24 familias y que él ha sido amenazado de muerte. Ante esto el Gobierno ha dado una versión más tranquilizadora, diciendo que no se ha producido ninguna denuncia de estos hechos. Los okupas procedían de uno de los barrios más marginales de Granada capital y muchos de ellos no tienen una vivienda, así amparándose en el borrador de la futura Ley del suelo que dice que se podría expropiar o aplicar el régimen de venta forzosa a los propietarios de pisos vacíos, se vieron con el derecho de ocupar las casas. La Guardia Civil hizo un gran despliegue alrededor de los edificios y entregó personalmente a cada okupa una citación del juez para que se personasen en el juzgado de instrucción número ocho de Granada. Tras escuchar a todos el juez ordenó el desalojo de los edificios. El desalojo se produjo sin sobresalto alguno y casi todos abandonaron el edificio antes de que se lo ordenase la Guardia Civil. La mayoría volverán a su antigua vivienda aunque algunos han decidido quedarse en la puerta del Ayuntamiento a vivir. La historia no termina aquí, todavía queda en el aire si la ocupación fue organizada por un cabecilla, y si como apuntó Izquierda Unida (IU) detrás hay intereses especulativos por parte del Alcalde socialista e insinuaban la posibilidad de que los edificios sean derribados.