Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

ARCHIVO DE SALAMACA

Los documentos de la Guerra Civil cada vez más cerca de Cataluña

Por La SemanaTiempo de lectura1 min
España15-09-2005

Los documentos incautados con motivo de la Guerra Civil volverán a Cataluña siempre y cuando el Senado no lo impida. Así quedó acordado después del Pleno del Congreso del pasado jueves 15 a través de un proyecto de Ley que sólo contó con la oposición del Partido Popular (PP).

Los 193 votos a favor frente a los 134 en contra del PP establecen que el Estado transferirá a la Generalitat los documentos, fondos documentales y otros efectos incautados en Cataluña a personas naturales o jurídicas. Este proyecto de Ley esta basado en el texto original aprobado en el Consejo de Ministros del 15 de abril. Fue en una ajetreada y polémica jornada parlamentaria en la que también se aprobó la Ley de Defensa Nacional. En el turno de intervenciones, el diputado popular, Gonzalo Robles, aseguró que esta medida no responde a “ninguna reparación histórica” sino que “se cumple con el tripartito y con los acuerdos políticos que el Gobierno tiene“. Unas declaraciones que contrastan con la satisfacción de los dirigentes catalanes que consideran el proyecto como la “reparación de una injusticia histórica” tal y como manifestó el diputado de Ezquerra Republicana (ERC) Francesc Canet. Por su parte, el diputado de Convergencia i Unió (CiU), Jordi Vilajoana, lamentó que “vascos, asturianos, aragoneses y valencianos no puedan hoy, con esta Ley, recibir un hecho que nos parece justo“. Y es que Cataluña no es la única comunidad que exigía la devolución de documentos históricos. Otras formaciones como el Partido Nacionalista Vasco (PNV), la Chunta Aragonesista (CHA), o el Grupo Mixto por medio de su diputada, Begoña Lasagabaster, también manifestaron su intención de recuperar para sus respectivas comunidades actas del periodo de la Guerra Civil. El diputado socialista, Mario Bedera fue el encargado de cerrar el debate y acusó al PP de confundir a la opinión pública y de "disfrazar" su voto en contra con "“razones técnicas que nada tienen que ver con la verdad“. Ahora el proyecto de Ley deberá seguir su trámite parlamentario en el Senado donde es poco probable que se paralice.