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EDUCACIÓN

La Ley de Universidades entra en las Cortes

Por Covadonga de la CuestaTiempo de lectura1 min
Sociedad30-09-2001

La Ley de Universidades (LU) resuelve su primer examen con sobresaliente en el pleno del Congreso de los Diputados y se dispone a afrontar una nueva etapa en la sala de las Cortes. El apoyo que recibió por parte del Partido Popular (PP) y de Coalición Canaria (CC), así como la abstención de Convergència i Unió (CiU) ha sido suficiente para anular la posibilidad de corregir la nueva ley.

La votación se saldó con 114 votos a favor provenientes de los partidos enmendantes (IU, PNV y Grupo Mixto) junto al PSOE, frente a una mayoría de 167 votos en contra del PP y CC. La enmienda del Grupo Socialista que iba acompañada de un texto alternativo no tuvo mejor suerte y recibió 179 votos en contra. CiU no otorgó su apoyo a los socialistas al considerar su propuesta "incoherente". Otro sector, la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE), ha enviado un escrito a todos los grupos parlamentarios expresando su oposición a la LU y quejándose de la mala imagen que se da de ellos "desde algunos lugares". La LU se enfrenta a los reproches que la consideran "retrógrada" y "centralista". La Agencia Nacional de Evaluación y Acreditación que pretende crear el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte; la disminución de becas; el vacío de financiación universitario al que la ley no da solución; la limitación de competencias autonómicas, así como la restricción de la autonomía universitaria son objeto de las reprobaciones de la oposición y de toda la comunidad educativa. La LU ha subido el primer peldaño y ha salido indemne pese a la controversia suscitada. El trámite parlamentario hacia su aprobación definitiva continuará en la Comisión de Educación, Cultura y Deporte, donde serán presentadas las enmiendas parciales. Carmen Chacón, diputada del PSOE, explicó como la LU "restringe el acceso a la Universidad, limita la autonomía de la Universidad para organizarse y seleccionar al profesorado, burocratiza su gestión, olvida los recursos y la igualdad e ignora la adaptación de la Universidad a la Unión Europea".