PRECIOS
La inflación sube un 0,2 por ciento en agosto
Por Paula Pons
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Economía14-09-2001
El Índice de Precios al Consumo aumentó en agosto un 0,2 por ciento, según el Instituto Nacional de Estadística. Así, la tasa acumulada de inflación se sitúa en el 2,5 por ciento y la interanual (la de los últimos doce meses) en el 3,7 por ciento. La inflación subyacente, que excluye la variación de los precios energéticos y de los alimentos frescos, creció un 0,4 por ciento y se situó en el 3,6 por ciento en tasa interanual.
Hoteles, cafés y restaurantes forman parte de los grupos de precios que más aumentaron, con un 1,4 por ciento. Les siguió ocio y cultura con un 1,3 por ciento. Los productos energéticos registraron un descenso en agosto del 1,6 por ciento, mientras que los precios de carburantes y combustibles bajaron un 2 por ciento. El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, aseguró que el dato del IPC consolida la tendencia a la baja de la inflación, aunque añadió que esperaba una "evolución más intensa". Rato también manifestó su sorpresa acerca de la fuerte subida registrada por los hoteles: "la rúbrica relacionada con los hoteles y los alojamientos me ha sorprendido y estamos en estos momentos estudiando cuáles son las razones de un incremento tan notable de esa rúbrica. Pero en el conjunto de todas las rúbricas del IPC estamos asistiendo a una clara desaceleración de los componentes más inflacionistas y eso asentará a la inflación española en el entorno de un punto por debajo de un punto de diferencial con la inflación europea", afirmó. Por otra parte, el sindicato Comisiones Obreras advirtió de que la inflación "difícilmente" se situará a final de año por debajo del 3,4 por ciento si se mantiene la tendencia "negativa" actual, especialmente, la del IPC subyacente, que es la que marca el comportamiento de los precios a medio plazo. Según el sindicato, esta desviación de la previsión inicial del Gobierno (2 por ciento) "no es imputable a choques externos de carácter coyuntural", sino a la permanencia de la inflación estructural.