TOROS

El Gobierno estudia propuestas de los ganaderos ante la ¬lengua azul¬

Por Almudena Hernández1 min

Espectáculos09-03-2005

La Fiesta es una gran perjudicada por la lengua azul. Si el Gobierno no oferce alternativas a los ganaderos de bravo, éstos sufrirán las consecuencias. Incluso, algunos tendrían que buscarse la vida de otra forma, pues pagarán las consecuencias de las medidas que ha impulsado el Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación (MAPA) para luchar contra la enfermedad de la lengua azul.

Representantes de los ganaderos de lidia, de la sanidad animal de las comunidades autónomas y del propio Ministerio de Agricultura, en la persona del subdirector general de Sanidad Animal, Arnaldo Cabello, mantuvieron una reunión la semana pasada para estudiar posibles soluciones. Durante el encuentro, se analizaron las propuestas de las asociaciones taurinas sobre el movimiento de los animales de lidia, fundamental para cubrir la demanda de las ferias. El sector taurino se comprometió a que el traslado del ganado garantice la seguridad sanitaria, para evitar que se ponga en peligro al resto de la cabaña ganadera. Según se acordó en dicho encuentro, esta semana se celebrará una nueva reunión para continuar analizando la situación epidemiológica de la lengua azul, y estudiar las propuestas sobre medidas a adoptar a partir del próximo día 1 de abril, fecha de entrada en vigor de las medidas anunciadas por Agricultura. En ciudades donde la Fiesta de los toros tiene un fuerte arraigo, como es el caso de Sevilla -que espera celebrar su tradional feria de abril en unas semanas-, se aguarda con preocupación el resultado de estas conversaciones. Según las informaciones emitidas por el Ministerio, durante las reuniones se han estudiado las posibilidades para los movimientos de los animales de lidia con destino a los espectáculos taurinos, desde las zonas de restricción al resto del territorio nacional de zona libre. Asimismo, el Ministerio ha informado sobre el acuerdo establecido con Portugal, país que también celebra espectáculos taurinos, para facilitar la movilidad de "animales sensibles a la lengua azul entre ambos países. Según Agricultura, este acuerdo establece que "cuando se trate de movimiento de reses de lidia se precisará autorización de la autoridad competente de sanidad animal de la Comunidad Autónoma de destino".