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BALONCESTO

Tres españoles al ‘Top-16’, dos fuera

Por Roberto J. MadrigalTiempo de lectura4 min
Deportes10-02-2005

La primera fase de la Euroliga no deja dudas para clarificar quiénes son los favoritos. El CSKA de Moscú, el Maccabi de Tel Aviv… y una lista no muy extensa de aspirantes a la fase final –los equipos turcos, el Bolonia, el Panathinaikos, algún otro italiano– que depara una competencia muy dura para los tres supervivientes españoles: Real Madrid, Barcelona y Baskonia.

Grupo A El Fortitudo de Bolonia confirmó todo el potencial que mostró la temporada pasada y, basado en la tripleta de bajitos formada por Milos Vujanic, Gianluca Basile y Gianmarco Pozzeco, dejó encarrilado su pase con cinco victorias consecutivas en los primeros partidos. Pero no le ha andado a la zaga –también ha concedido sólo dos derrotas y ha sido el mejor de los segundos de grupo– el Efes Pilsen de Estambul, el mejor equipo de la competición en el aspecto defensivo. El Cibona croata, siempre peligroso en el fortín de Zagreb, se hizo con la tercera plaza del grupo merced al relax del Real Madrid en los últimos partidos, una vez sentenciada la clasificación. El equipo de Bozidar Maljkovic ha cumplido su objetivo, ser competitivo y pasar la primera criba. El objetivo del técnico serbio es forjar la mentalidad de sus jugadores, y en ese aspecto las derrotas contra sus rivales directos le han sido, sin ninguna duda, de gran utilidad como aprendizaje. El Sopot polaco –debutante en la Euroliga– se convirtió en la sorpresa agradable de la competición, merced a una buena defensa y victorias sonadas contra los boloñeses y los grandes perjudicados del grupo: Estudiantes y Olympiakos. A los del Ramiro les faltó empaque y liderazgo –la eclosión de Sergio Rodríguez no llegó a tiempo–, y también les pesó el esfuerzo para remontar el vuelo en la ACB. Grupo B El del Barcelona ha sido uno de los grupos más igualados: nada menos que seis equipos consiguieron siete o más victorias. En el equipo azulgrana no han rendido como se esperaba las nuevas incorporaciones –Joan Montes se encontró con un proyecto hecho por Svetilav Pesic–, por lo que no hubo recetas milagrosas: defensa y el talento de los de siempre para conseguir victorias en ocasiones trabajadas y escapar de los peligrosos empates. El Zalgiris de Kaunas, sin el lesionado Arvydas Sabonis pero con jugadores experimentados como Tanoka Beard, Robert Pack y Mindaugas Timinskas, que pasaron por la ACB consiguió tres victorias a domicilio, en particular dos contra los primeros del grupo. El AEK de Atenas se sobrepuso a un mal comienzo, en el que cosechó cuatro derrotas en los primeros cinco partidos. El conjunto griego acude en principio sin mayores obligaciones al Top-16. No sucede lo mismo con el Montepaschi de Siena, un fijo en las dos últimas fases finales de la Euroliga. El conjunto italiano atesora una plantilla amplia de rotaciones y con experiencia suficiente como para optar a todo. Con objetivos más modestos, el último equipo clasificado, otro histórico del baloncesto europeo, el Scavolini de Pésaro, parte más con la intención de aprovechar el buen momento con que ha terminado la liguilla de la primera fase. Grupo C El CSKA de Moscú confirmó su condición de favorito siendo el primer equipo en diez años que pasa invicto la primera fase de la máxima competición europea. La superioridad de los rusos –anfitriones de la Final Four– queda patente por la diferencia con respecto al segundo del grupo, el Panathinaikos, que cosechó seis derrotas. Aun así, el conjunto de Zeljko Obradovic ha cedido derrotas por muy pocos puntos y se ha reforzado con el turco Ibrahim Kutluay y el pívot Lonny Baxter, procedente de la NBA. También ha mejorado la plantilla el Benetton de Treviso con el ex alero del Maccabi David Bluthenthal: con un equipo muy renovado con respecto a anteriores campañas, no hay duda de que Ettore Messina ha sacado provecho de sus grandes conocimientos para exprimir el potencial de sus jugadores. Más irregular –ha cosechado rachas de victorias y derrotas– ha sido el Ülker de Estambul, cuyo mejor argumento, sin duda, es una de las mejores defensas del continente. El Baskonia, en tanto, se vio perjudicado por las lesiones y la falta de la garra que imprimía el Chapu Nocioni. Aun así, la combatividad que impregna al equipo vitoriano el técnico Dusko Ivanovic le ha permitido avanzar, no sin sobresaltos, y lo convierte en un rival imprevisible, capaz de dar la sorpresa. Una oportunidad que no tendrá el Unicaja de Málaga, que se vio también asolado por una plaga de lesiones que dificultó la puesta a punto del equipo hasta que no fue demasiado tarde, cuando las opciones del conjunto de Sergio Scariolo pasaban por los fallos de otros.