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Los jóvenes españoles se consideran más felices que los europeos

Por Patricia de Pablo VidalTiempo de lectura2 min
Sociedad20-01-2005

Más del 70 por ciento de los jóvenes españoles de entre 15 y 29 años viven en casa con sus padres, a pesar de que su independencia de la familia ha aumentado en los últimos cuatro años, según el informe sobre juventud en España 2004, publicado por el Instituto de la Juventud (INJUVE).

La población joven de entre 15 y 29 años representa alrededor de la cuarta parte del total de la población española, y entre los cambios relevantes, destaca la feminización del empleo. El grupo más numeroso es el de 25 a 29 años con 3.500.248 jóvenes, mientras que el grupo de 15 a 19 años son 2.464.580, un millón menos. Además, cabe destacar que los jóvenes inmigrantes en España, representan un 5,2 por ciento del total de la población joven, que es de 9,1 millones, y manifiesta un claro interés por integrarse en la sociedad. En España, sólo uno de cada cuatro jóvenes tiene una autonomía completa. El joven español se esfuerza por alcanzar un nivel óptimo de educación y por encontrar un trabajo en el mercado laboral para obtener un sueldo con el que no es fácil afrontar, por ejemplo, la compra de un inmueble. Por ello viven en casa de sus padres hasta edades tan tardías y actualmente representan el 70 por ciento de los jóvenes. Sin embargo, el porcentaje de personas jóvenes que ya no viven habitualmente en casa de sus padres ha aumentado de forma considerable, del 18 al 24 por ciento en los últimos cuatro años. Desde el año 2000, la población juvenil en edad de trabajar, de 16 a 29 años, se ha reducido en un 8 por ciento, al pasar de 8,7 millones de jóvenes potencialmente activos a 8 millones en el 2004. En cuanto a sus relaciones con la familia, los sociólogos destacan que el espacio familiar se ha convertido en un espacio de negociación continua para evitar los conflictos que surgen de la convivencia entre padres e hijos. Independientemente de estas circunstancias, los jóvenes españoles son bastantes felices, están por encima de la media europea y muy igualados con los países nórdicos. La felicidad de la juventud española se debe fundamentalmente a la armonía de sus relaciones interpersonales con los amigos, la pareja y la familia. Los jóvenes españoles suelen consumir tabaco y alcohol durante su tiempo de ocio, de hecho son los que más tabaco consumen de toda Europa. Por el contrario, actualmente beben menos alcohol, pero los grupos que lo hacen, suelen beber con más exceso.