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PP GALLEGO

Rajoy pone orden en la crisis de los ‘populares’ gallegos

Por Raúl Romero MartínTiempo de lectura2 min
España02-11-2004

La crisis del PP gallego ha obligado a intervenir a la dirección nacional del partido. El propio Mariano Rajoy viajó esta semana hasta Santiago de Compostela para buscar una solución a los frentes abiertos en el PP gallego y evitar que la crisis afecte al Gobierno de la Xunta presidido por Manuel Fraga.

El viaje de Mariano Rajoy se produce después de que el presidente del PP en Galicia, Manuel Fraga, buscara todas las alternativas posibles para poner fin a una crisis que se prolonga semanas después del congreso del PP gallego. El presidente de la Xunta se reunió con Jesús Palmou para dejar clara su posición en el partido y en el Ejecutivo gallego. Acabada la reunión todo fueron interrogantes. Ninguna declaración de Palmou a su salida hacía pensar en una posible dimisión y aclaró a la prensa que informaría próximamente de "noticias" sobre su futuro político, que pasarían por "preservar mi dignidad". Minutos después, Palmou aplazaba su intervención en la comisión de Economía del Parlamento de Galicia por encontrarse "en una situación un tanto especial". "A mí se me pide prudencia, y no voy a hacer ninguna declaración en este momento", agregó. Palmou apuntó que tendría un contacto con los medios de comunicación, "que estoy convencido que debo tener, se lo debo y a todos los ciudadanos, pero en este momento no puedo hacer ninguna declaración”. Manuel Fraga, después de hablar con Palmou, dijo que estaba dispuesto a "afrontar lo que haga falta" por "el servicio a Galicia". Sin embargo, Don Manuel quiere evitar el efecto dominó y se reunió con otros miembros clave de su Ejecutivo del entorno de Palmou: López Veiga y Núñez Feijoo. El consejero de Pesca, Enrique López Veiga, apenas dejó lugar para la negociación: si se va Palmou, él también se marcha. Estos hechos provocaron el viaje relámpago de Rajoy a Galicia. El presidente del PP y Manuel Fraga alcanzaron esa misma tarde "una buena solución" a la crisis abierta de nuevo en el seno de la formación y en la Xunta. Ángel Acebes pidió "respeto para las decisiones adoptadas en el congreso regional" y reiteraba su apoyo a Palmou. Mientras tanto, Fraga se reunía con Palmou, López Veiga y Núñez Feijoo para solucionar cuanto antes la crisis. Por su parte, José Luis Baltar y José Cuiña, los principales beneficiados del previsible relevo del consejero de Justicia, optaron por guardar silencio.