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EGUNKARIA

Maragall rectifica sus palabras sobre la actuación de la Guardia Civil

Por Cristóbal CabezasTiempo de lectura1 min
España07-03-2003

El presidente del Ejecutivo, José María Aznar, reclamó al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que desautorice al presidente del PSC por “justificar y dar amparo” a las palabras de un presunto terrorista que aseguró haber sido objeto de torturas por parte de la Guardia Civil, en alusión a las manifestaciones hechas por el director de Egunkaria. Recordando las palabras de Maragall, quien afirmó que Otamendi le parecía sincero cuando hizo su denuncia, Aznar se dirigió a Zapatero y le pidió que lo desautorice y rectifique.

El presidente del Partido Socialista de Cataluña (PSC), Pasqual Maragall, dio un giro a sus opiniones sobre el caso Egunkaria y aseguró que nunca ha puesto en duda la actuación policial. Tras debatir el asunto con la dirección del PSOE, destacó su “respeto total y absoluto” hacia las Fuerzas de Seguridad. Aseguró que “nunca he puesto en duda” sus actuaciones y expresó su “confianza” en que “se clarifique” la polémica. Maragall rebajó considerablemente el tono de sus palabras, presumiblemente después de la conversación telefónica que mantuvo con la “dirección del PSOE”. El dirigente catalán se negó a concretar si fue José Luis Rodríguez Zapatero quien le exigió una rectificación. No obstante, acusó al Gobierno de utilizar este asunto “por necesidades del guión”, para desviar el debate político de cuestiones más incómodas para el Ejecutivo. El dirigente del PSC, que se mostró “extrañado” por las duras acusaciones que le lanzó Rodrigo Rato, definió al vicepresidente segundo como “un amigo” y “un político que no se presta fácilmente a este tipo de juegos” y afirmó que ha pedido una entrevista con él “para que quede clara mi posición y este conflicto no se use para tapar otros problemas”. Mientras, el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, instó al “Estado, al Gobierno y a los jueces a ponerse a investigar, con entusiasmo e interés, cualquier caso de denuncia de tortura que se pueda producir”.

Fotografía de Cristóbal Cabezas