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ANÁLISIS DE ESPAÑA

Esto va en serio

Fotografía

Por Alejandro RequeijoTiempo de lectura2 min
España13-04-2015

Por si alguien aún no se ha dado por enterado, esto va en serio. Si alguien aún piensa que 147 muertos en una universidad de Kenia le pillan demasiado lejos que recuerde que ayer fue en París igual que hace once años fue en Atocha. Desde entonces, la amenaza ha seguido mutando en medio del fanatismo salafista y la indiferencia de Occidente, empeñado en tomar decisiones sin reparar en las consecuencias, en Irak, en Libia o en Siria, donde Al Asad ya no parece tan malo. Esto va en serio, de verdad. Desde la península Ibérica se tarda menos en llegar a Túnez que a Canarias. Las fauces del Estado Islámico ya se expanden por el norte de África. Por zonas como Libia, muy cerca de Italia, que ya no suena tan lejana.

En dos años las fuerzas de seguridad ya han desarticulado en España diez células dedicadas a captar radicales para mandar a zonas de conflicto. Tour operadoras del terror. Y ese camino ya lo han emprendido desde España un centenar de personas. Al menos eso dice Interior, pero hay estudios que elevan la cifra incluso a 400. Si alguien aún opina que eso no le afecta mientras vayan a matarse allí, que piense que algún día pueden volver aquí. Y que eso es exactamente lo que ha hecho ya una decena. De ellos sólo han sido arrestados la mitad. ¿Y la otra mitad? Confiemos en que están controlados.

Si alguien todavía cree que la situación no es para tanto, que lea el auto del juez Pedraz sobre las intenciones de la última célula desarticulada en Cataluña: fotografías de edificios oficiales y planes para atentar, desde una librería judía a políticos. Por si fuera poco, nuestro principal aliado en esta historia es nada menos que Marruecos. Un mal menor al que aferrarse, qué remedio, para evitar tener la amenaza no ya a 14 kilómetros, sino a las puertas de Ceuta y Melilla. Cada vez más personas se dejan seducir: mujeres, menores o conversos como el peluquero Antonio Sáez, quien quizá algún día soñó con fundar una familia y tener una casa en la playa hasta que pidió que le llamasen Alí. Y pasó a soñar con empuñar un kalashnikov.

El último ejemplar de la revista oficial del Estado Islámico, el número ocho de Dabiq, resume a la perfección a lo que nos enfrentamos: "Que el mundo sepa que estamos viviendo hoy en una nueva era. Quien quiera que estuviera sin hacer caso ahora debe estar alerta. Los musulmanes hoy tienen una declaración tronante ,voz alta y poseen unas pesadas botas. Tienen una declaración que hará al mundo escuchar y entender el significado de terrorismo y las botas para pisotear el ideal del nacionalismo, destruir el ideal de la democracia y descubrir su naturaleza desviada”. Esto va en serio.

Fotografía de Alejandro Requeijo

Alejandro Requeijo

Licenciado en Periodismo

Escribo en LaSemana.es desde 2003

Redactor de El Español

Especialista en Seguridad y Terrorismo

He trabajado en Europa Press, EFE y Somos Radio