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Análisis de Deportes

La motivación en el fútbol

Fotografía

Por Javier BirlangaTiempo de lectura3 min
Deportes09-02-2015

Si hay algo que el fútbol ha demostrado en los últimos años es que a veces la motivación que encuentran los jugadores para determinados partidos no tiene por qué venir de la trascendencia del choque, ni del dinero que cobren y ni siquiera del propio rival. Muchas veces, la motivación de los partidos importantes se sacan de frases desafortunadas, que tocan el orgullo de un equipo que sale a relucir en el terreno de juego en forma de contestación.

El pasado sábado se vivió el último caso de este tipo de motivaciones. El Atlético, cansado de la campaña generada en la que se les achaca ser un "equipo violento", aprovechó el mal momento del rival para dar una lección de fútbol y endosar la mayor goleada al eterno rival en mucho tiempo. Quizás ahora todos los que les tildaban de "violentos" o de "agresivos" se lo piensen dos veces antes de volver a usar esos términos.

Pero éste solo ha sido el último ejemplo de una larga trayectoria de errores que siempre suelen saldarse con un buen rapapolvo. El anterior caso tuvo lugar en las semifinales de Champions de la temporada pasada entre el Bayern de Múnich y el Real Madrid. Josep Guardiola tuvo el desacierto de tildar de "atletas" a los jugadores blancos afirmando que no fueron capaces de dar "ni tres pases seguidos" en la ida. Sobra decir que el 0-4 de la vuelta debió escocer en exceso al ex entrenador azulgrana.

Otro famoso caso también tiene como protagonistas al Real Madrid y a Josep Guardiola. No obstante, el de la frase desafortunada fue Sandro Rosell. El entonces presidente del Fútbol Club Barcelona aseguró que el cuadro catalán ganaría la final de la Copa del Rey al equipo de Florentino Pérez por "5-0, para no perder la costumbre". Dicha Copa, a pesar de la caída provocada por Sergio Ramos en la celebración, luce en las vitrinas del Santiago Bernabéu.

Por suerte o por desgracia, dependiendo del equipo al que se le tenga afición, el Real Madrid suele ser el gran protagonista de este tipo de motivaciones. Incluso, desde dentro del vestuario blanco. El propio Sergio Ramos salió en portada del Diario MARCA afirmando que su equipo ganaría 3-0 al Olympique de Lyon y se clasificaría a cuartos de final de la Champions en 2010. El partido acabó 1-1 y el billete de una competición cuya final era en el Bernabéu se lo llevaron los galos dejando a Pellegrini más que sentenciado.

Y en esa misma competición se pudo ver un par de años antes una de las mayores "cagadas" en cuanto a prepotencia y no saber "cerrar el pico". El entonces presidente del Madrid, Vicente Boluda, aseguró, en la eliminatoria ante el Liverpool, que los blancos "ganarían 3-0 en el Bernabéu" y que en la vuelta en Anfield les iban a "chorrear". La ida acabó 0-1 y la vuelta 4-0 para los ingleses. Toda una proeza en el arte de la adivinación.

Lo vivido el sábado pasado quizás sea el ejemplo menos claro de este tipo de motivación, pues el Atlético tenía motivos de sobra para hacer el gran partido que hizo, y además la "ofensa" no venía directamente de un integrante del rival. Pero es evidente que en el fútbol, al igual que en la vida, más vale no hablar más de la cuenta.

Fotografía de Javier Birlanga

Javier Birlanga

Director de Deportes de LaSemana.es

Graduado en Periodismo por la UFV

Redactor de Deportes en Cadena SER

He trabado en MARCA y Radio Marca