ANÁLISIS DE SOCIEDAD
Manos Unidas, el triunfo de la caridad
Por Almudena Hernández
2 min
Sociedad19-09-2010
Son el símbolo del trabajo, del compromiso, de la "solidaridad", de la hermandad. Las manos representan la realización de las personas, la capacidad de crear, de obrar, de ayudar. Dice la Real Academia Española de la Lengua (RAE) que remangarse es tomar enérgicamente una resolución. Y eso es lo que hizo hace décadas un grupo de mujeres: ponerse en marcha para acabar con el hambre y luchar contra las injusticias. Hace unos días, tras el fallo del jurado del Pemio Príncipe de Asturias de la Concordia, se iluminó sobremanera la labor que viene realizando desde hace más de medio siglo la ONG Manos Unidas. Elegir un destinatario en un premio siempre suele ser injusto, principalmente para quien no lo gana, pero también es un aliciente para quienes un día pueden ganarlo o para quienes, con envidia sana, se alegran verdaderamente por el reconocimiento a la labor de otros. En Manos Unidas ya saben qué van a hacer con el valor económico del galardón: destinarlo a Haití; y también saben que ahora más que nunca deben aprovechar el enorme altavoz que estos premios -que ganan poco a poco en internacionalización y prestigio- para que las ONG católicas salgan del armario. Mientras el ruido y los titulares se lo llevan las muchas injusticias llevadas a cabo por miembros de la Iglesia. Pero, ¿qué pasa con las buenas obras? En todo proyecto, como en la vida misma, siempre hay un por qué y un para qué. Y ambas cuestiones quedan resueltas en ese matiz que existe en el significado de las palabras. No es lo mismo la solidaridad que la caridad. No es lo mismo ayudar al otro por que en él se ve la misma imagen de Dios, que una "adhesión circunstancial a la causa o empresa de otros", reza la RAE. En Manos Unidas lo saben desde hace mucho tiempo. ¡Felicidades!
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo