ANÁLISIS DE SOCIEDAD
La puerta de Europa
Por Almudena Hernández
2 min
Sociedad03-01-2010
Caduca la primera década del futurista y prometedor siglo XXI y el viejo continente sigue siendo el viejo deseado, el Dorado de los sueños. España -o su Gobierno, más bien- saca pecho ante la Presidencia de la Unión Europea, ese club de pseudoamigos que tiene ante sí el gran reto de poner en marcha el tratado de Lisboa, ante la fallida constitución europea. Pero no es la única patata caliente que se plantea con el cambio de calendario en el ámbito comunitario. La Unión Europea mira al oeste e, incluso más allá, mientras por el sur prosigue el goteo incesante de la inmigración ilegal. En el norte nos adelantan los campeones que ya salen de la crisis y para alcanzar el oeste aún hay que salvar una gran distancia y no sólo la que impone el Atlántico. En los primeros días de 2010 más de 50 personas alcanzaron las costas españolas en el Mediterráneo. Hace 20 años, que se dice pronto, como era novedad, la llegada de las pateras era noticia. Hoy, en la segunda década del deseado siglo XXI la agenda mediática y política mira para otros lados. No hay que remontarse tanto tiempo atrás. Hace sólo un año, por estas fechas, Europa y el mundo se echaban las manos a la cabeza por la situación que se vivía en Palestina ¿realmente se ha solucionado? Es sólo un ejemplo, pero sirve para reflexionar. ¿Acaso se ha acabado el bloqueo a los palestinos? ¿Se ha resuelto la pobreza en el África subsahariana? ¿Se ha solventado ya el conflicto con los piratas que atracan a los pescadores? ¿Qué ha pasado con el caso Marta del Castillo? ¿Y con el cambio climático? ¡Pero si ahora hay reserva de agua en España para todo el 2010! Algunas veces la auténtica noticia no está en la actualidad, sino en tratar de buscar las razones que la mueven, los porqués y los paraqués. Arranca el 2010 y España presume de ser más europea que nunca. Pero, ¿se puede ser europeo sin ser del mundo? ¿o da lo mismo que 20 años después decenas de personas sigan arriesgando sus vidas en una embarcación de mala muerte para alcanzar su particular Dorado? Quizás se nos ha olvidado que España es puerta de muchas cosas. Lo es de América, del mundo árabe y de África. Aunque ahora toque sólo serlo de Europa.
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo