Esta web contiene cookies. Al navegar acepta su uso conforme a la legislación vigente Más Información
Sorry, your browser does not support inline SVG

OPERACIÓN ANTI ETA

La policía detiene en Burdeos a seis terroristas preparados para entrar en España

Fotografía Un coche de la policía francesa, que participó en la operación contra ETA

Por Cristóbal Cabezas Martín Tiempo de lectura2 min
España30-01-2002

Los seis detenidos son: Ángel María Cruz Arrozpide y Jesús María Martín Hernando, ambos corresponsables de los taldes (grupos) de reserva de la banda ETA; Iosu Ordóñez Fernández, que participó en los secuestros del industrial José María Aldaya y del abogado Cosme Delclaux; Ainhoa Barbarín Iurrebaso y Xabier Zabalo Beitia, dos de los tres componentes del comando itinerante que colocó seis coches bomba en los últimos dos años; y Mikel Urkia Gogorza, detenido por resistencia y desobediencia civil en varias ocasiones.

Los detenidos estaban escondidos en un apartamento en la localidad de Le Bouscat, en las afueras de Burdeos. El vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior, Mariano Rajoy, informó de que "estaban a la espera de entrar en España de forma inminente para formar dos o tres comandos de liberados". La vivienda era vigilada desde hacía unos días y la operación estuvo a punto de realizarse el miércoles día 30. Sin embargo, la ausencia de alguno de los terroristas y el hecho de que la puerta de la casa estuviera blindada retrasó la operación y se hizo de noche en Burdeos. La policía francesa tiene prohibido efectuar registros domiciliarios durante la noche. Al día siguiente, Arrozpide fue detenido por agentes de élite del cuerpo de Intervención de la Policía Nacional francesa cuando salió del edificio para comprar la prensa y unas baguettes. A continuación, fue asaltada la vivienda con grandes cautelas, debido a que la presencia de varios terroristas presagiaba una gran resistencia. Sin embargo, los otros cinco miembros de ETA fueron detenidos sin contratiempos. En el edificio se encontraron cinco pistolas, tres subfusiles, un fusil de asalto, una bolsa repleta de explosivos, un lanzagranadas algo rudimentario, 7.000 euros en metálico y documentos falsos de identidad franceses y españoles. Toda la operación se desarrolló bajo el control de la juez antiterrorista Laurence Le Vert. Después del registro, los detenidos fueron trasladados a las dependencias de la Policía Judicial y más tarde a París. Rajoy remarcó el hecho de que la operación policial se efectuara "en la retaguardia de la banda, lejos de la frontera entre Francia y España, donde los terroristas se sienten más seguros y se dedican a planificar atentados". En esta misma semana, la policía francesa localizó en una vivienda de Tolouse un "gran fichero" con "información estratégica" de ETA que incluye tarjetas "de cientos de objetivos". La importancia de la información localizada ha llevado a las autoridades francesas a decidir el traslado inmediato de todos los datos a la Audiencia Nacional y al Ministerio del Interior para que avise a los amenazados. Por su parte, los ingenieros de la banda terrorista tenían ya fabricados en el polvorín hallado en un chalé de Serres-Castet, cerca de Pau, una maleta de lanzagranadas y un reposacabezas de coche preparado para ser convertido en bomba. Los policías franceses se sorprendieron al comprobar la abundante y variada documentación que había en su interior. El fichero contenía "un listado de cientos de objetivos de la banda", especialmente de cargos públicos del Partido Popular y del Partido Socialista, agentes de varios cuerpos de seguridad, jueces y periodistas". Además, entre los archivos había "información estratégica de ETA" sobre futuras campañas de la banda terrorista.

Fotografía de Cristóbal Cabezas Martín