PUNTOS DE DEBATE
Ni de aquí ni de allá
Por Elías Said
3 min
Opinión14-09-2008
Hace unas semanas que sucedió la tragedia de Spanair en el aeropuerto de Barajas y desde entonces, además de lamentarme por las víctimas y sus familiares, este trágico acontecimiento sigue estando presente en mi mente ya que, además del lógico impacto humano, este hecho terminó por reafirmar mi condición de ¨ni de aquí ni de allᨠque poseo, por mi condición de extranjero desde casi una década. El suceso acaecido en Madrid me reafirmó cuan importante es para mí España y esta ciudad, a pesar de no haber nacido en ella, cuánto dolor genera saber que suceden este tipo de accidentes en un lugar que has logrado hacer tuyo sin ser de allí; y cómo uno construye sus afectos en él, lo cual hace cada vez más difícil decir de donde se es. El fatídico día, como muchos, estuve “pegado” a Internet en mi trabajo, viendo todo lo que sucedía, revisaba la lista de pasajeros y tenía en mi mente a quienes, por una u otra razón, pudiesen estar en medio de este acontecimiento trágico. Durante el seguimiento de las noticias del accidente aéreo, reafirmé mi condición de ser, aunque sea por afecto, español, ya que no fue cualquier accidente, al menos no para mí. Sucedía en Madrid, en España, una ciudad y un país que logré querer pese a lo duro que suele ser para uno que no pertenece a allí. Al igual que sucedió en el 11-M, el accidente de Spanair no borró por un momento nuestra condición de nacimiento y nos hizo ser ¨ni de aquí, ni de allá¨. Sólo nos hizo “ser” y tratar de solidarizarnos con las víctimas y sus familiares aunque fuese en pensamiento. En fin, creo que logró sacar lo mejor que tiene la sociedad española y nos hizo ver el dolor de la forma más universal. Ojalá muchos de nosotros dejásemos de lado el lugar de procedencia, las diferencias culturales y valorásemos a la persona por su condición de ser y vivir, al igual que nosotros, en un mismo espacio, con los mismos problemas y necesidades; sin que tuviese que suceder un hecho de estas características. Tal vez así, dejásemos de ver a la inmigración, en general, como un tema que preocupa y empecemos a verles como personas que, al igual que el resto, solo quiere vivir, integrarse y sentir el lugar donde vive como suyo. Soy ¨ni de aquí, ni de allá¨, no soy español de nacimiento pero siento España como mi propio país, es algo que sucede a quien, no solo, pasa por un lugar sino que lo vive como uno más. ¿Cuántos de ustedes comparten esta condición? ¿Cuántos españoles, colombianos, venezolanos, marroquíes aprenden a querer la tierra donde se encuentran, sin ser originarios de ella? ¿Cuántos de nosotros tenemos una pareja o amigo(a) que nos hace querer sus raíces sin haber estado en el lugar de donde son? Ante todo, mis respetos a los familiares de las víctimas de Spanair, de parte de alguien con las características que les expuse aquí, les manifiesto mi solidaridad, pensamiento y dolor que siento cada vez que recuerdo lo sucedido.
