ANÁLISIS DE SOCIEDAD
Una señal
Por Almudena Hernández
1 min
Sociedad13-01-2008
Las clínicas abortistas se han puesto en huelga. El motivo: protestar. Pero quizás también lo hagan para adquirir protagonismo o para formar parte de un plan maquiavélico y político que quizás el común de los mortales desconozcamos -"piensa mal y acertarás", dice el refrán- o para, sin saberlo, participar en la "señal" que espera del "destino", la "vida" o "Dios" alguna de las mujeres que se iba a someter a un aborto en estos días. En las últimas jornadas la prensa ha publicado de todo sobre ese tema: desde el papelón de la mujer a la que expiraba el plazo legal para abortar por culpa de esta huelga hasta la alegría de los colectivos antiaborto. Pero la noticia no publicada quizás haya surgido en la intimidad de esa embarazada que esperaba la señal para afrontar su vida y que ha cambiado de opinión para dar una oportunidad a su hijo. El tiempo dirá luego si llegará si el que va a nacer -ahora sí- va a ser catedrático, premio Nobel, mandatario, médico o abogado. O si esta sociedad de doble moral le condena a la marginación y a la injusticia. En 2007 más de 100.000 abortos eliminaron la posibilidad de vivir a otras tantas almas. Quizás, en los días que ha durado la huelga en las 50 clínicas abortistas que la han secundado en toda España, alguna de las 2.000 criaturas que iban a ser abortadas ha podido aferrarse a la vida después de que su madre recibiera "una señal".
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Almudena Hernández
Doctora en Periodismo
Diez años en información social
Las personas, por encima de todo