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ANÁLISIS DE SOCIEDAD

Y todo a media luz

Fotografía

Por Almudena HernándezTiempo de lectura2 min
Sociedad04-02-2007

El resultado de la convocatoria de apagón para concienciar contra el cambio climático es como para escribir un tango. Para empezar, podría ser: "Corrientes 348 segundo piso, ascensor". Aunque según los ecologistas habría que cambiar la primera palabra por las dos que conforman el concepto de "energía renovable" y la última, evidentemente, por las escaleras, pues no sólo de aerobic vive el hombre. Que quede claro que no está de más que alguien llame la atención al mundo sobre el despilfarro colosal de energía y el gigantesco daño que el hombre está haciendo al medio ambiente. En este tango desgarrado que es la vida, una siempre es un poco malpensada: la pasión del baile evidentemente no significa amor incondicional. O lo que es parecido: la concienciación sobre el cambio climático no significa olvidarse del interruptor durante cinco minutos. ¿Habrán retrasado alguna ejecución en la silla eléctrica como forma de protesta ante el maltrato al planeta? Eso sí que sería para escribir un tango. ¿Qué habrá pensado ese enamorado en el chat que encontró las musas a las ocho menos cinco de la tarde del pasado jueves para declararse a su novia cibernética? ¿Y el creativo que lleva toda la jornada en busca de una idea feliz y justo a esa hora se le enciende la bombilla y la tiene que apagar? Seguro que ninguno de ellos no estarían en el siete por ciento de españoles que participaron en el apagón. Dicen que muchos de los grandes genios escriben sus poemas más amargos de noche, o en la noche de su alma, cuando la vida les ha arrancado el corazón, o cuando contemplan las estrellas por la ventana. Pero, claro, pocos escriben ya a la luz de las velas poemas de amor, aunque alguno habrá aprovechado la oscuridad para poner en práctica el estribillo del tango que da título a estas líneas: "Y todo a media luz, a media luz los dos. A media luz los besos, a media luz los dos. Y todo a media luz, que brujo es el amor. A media luz los besos, a media luz los dos". No, si al final los ecologistas, aunque no salven el planeta, van a lograr repuntar las cifras de la natalidad en España.

Fotografía de Almudena Hernández

Almudena Hernández

Doctora en Periodismo

Diez años en información social

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