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TERRORISMO

¬Un español más¬ consigue desmantelar al ¬comando Madrid¬

Fotografía Coches afectados por la explosión del coche bomba en el atentado de Madrid

Por Mª Jesús TorresTiempo de lectura2 min
España08-11-2001

"Ha habido un atentado... Les he visto salir corriendo de donde la bomba. Les sigo”. Así comenzaba la llamada de casi 20 minutos a la policía del que ya se conoce como el héroe anónimo. Él, que sólo se considera "un español más", consiguió con su persecución que la policía desmantelara el comando Madrid, uno de los más desconocidos por las fuerzas de seguridad.

Poco después de las 9 de la mañana del pasado martes, Aitor García y Ana Belén Egües, presuntos miembros del comando Madrid de ETA, hicieron estallar un coche bomba en la calle Corazón de María de Madrid. Su objetivo era Juan Junquera, secretario general de Política Científica. Un testigo sospechó de la actuación de una pareja que tranquilamente abandonaba la zona de la explosión y se metía en un coche. Inmediatamente telefoneó desde su móvil al 092, número de la Policía Municipal, y comenzó la persecución con la misma tranquilidad y sosiego de aquellos a quienes perseguía. A lo largo de todo el trayecto, el héroe anónimo fue comunicando a la policía los pasos de los presuntos etarras, pero también sus sospechas de que quizás podrían haberlo visto. La persecución llegó hasta la calle del doctor Vallejo, donde ya a pié, el testigo indicó a unos policías por dónde habían seguido los presuntos terroristas, una vez habían abandonado su vehículo. Después de 20 minutos, la policía logró detener a Aitor y Ana Belén en un bar de la zona, sin que opusieran resistencia. Así quedaba, según el ministro de Interior, Mariano Rajoy, desarticulado el comando Madrid. Investigaciones posteriores demostraron por qué este comando era uno de los comandos más desconocidos por la policía. Por ejemplo, cambiaban de miembros con mucha rapidez. Tenían el piso franco en Salamanca, al resguardo de cualquier sospecha. Allí encontraron material informático, explosivos, matriculas falsas y abundantes documentación. Los interrogatorios han determinado que los actuales integrantes del comando fueron los autores de los últimos atentados cometidos en Madrid. Así mismo, tenían ya establecidos sus próximos objetivos, entre ellos el presidente de la Audiencia Nacional y el director de la revista Época. Ana Belén Egües confesó a la policía que ETA pretendía copiar al IRA cuando rompió la tregua en 1996 y hacer estallar las dos furgonetas cargadas con 1.688 kilos de explosivo que la Guardia Civil interceptó en 1999. El destino serían las Torre Picasso de Madrid y, el objetivo, poner fin a la tregua.

Fotografía de Mª Jesús Torres