REINO UNIDO
El recuento de víctimas alcanza los 55 muertos
Por Salva Martínez Más
2 min
Internacional17-07-2005
El primer nombre de las víctimas que se dio a conocer la semana pasada fue el de Susan Levy, de 53 años. Ella fue una de las 26 personas que murieron en la explosión que se registró en la estación de King’s Cross.
Otra de las primeras víctimas en conocerse fue Gladys Wundowa, de 51 años. Trabajaba para el University College London hasta que perdió la vida junto a otras 12 personas en el autobús que explotó en Tavistock Square. A finales de la semana pasada se identificaron a 55 de las personas que murieron el 7-J. En ese momento, ya había total seguridad de que el número de personas que murieron en los atentados no superaría las tres cifras y de que, como dijo la semana pasada Ian Blair, el jefe de la Policía Metropolitana de Londres, el 7-J representa “el mayor crimen de la historia inglesa”. Anat Rossenberg, israelí de 39 años que vivía en la capital británica desde hace 18 y que murió en el autobús que explotó en Tavistock Square, huía de los atentados que se cometen en Israel casi a diario, especialmente de los que tienen como objetivos los medios de transporte públicos. “Tenía verdadera fobia a los atentados contra los autobuses que hay en Israel. Hasta el punto de que no subía en autobús allí. Es terrible que esto le haya ocurrido a ella aquí, en el único atentado contra un autobús en nuestra historia”, explicó la semana pasada su compañero sentimental a la agencia de noticias France Presse. Shehaf Tanweer, de 22 años, el terrorista que reventó su mochila bomba en la estación de Aldgate, tenía la misma edad que David Foulkes, un joven de Manchester que viajó a Londres para visitar a un amigo y al que la explosión de la estación de Edgward Road le quitó la vida. Este “joven súper estable”, según sus padres, acababa de empezar a trabajar en el departamento de ventas del periódico británico de centro izquierda The Guardian. El fanatismo de Mohammad Sidque Khan, de 30 años, quien murió matando en Edgware Road, truncó su futuro junto con el de otras seis personas.