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SOLIDARIDAD

Unos 12 millones de personas trabajan como esclavos en el mundo

Por Patricia de PabloTiempo de lectura2 min
Sociedad11-05-2005

Respaldada por el lema "Promover un trabajo decente para todos", la Organización Internacional del Trabajo (OIT) acaba de publicar un informe sobre su esfuerzo más reciente: la abolición del trabajo forzoso. Según el documento, alrededor de 12 millones de personas en el mundo son víctimas de la esclavitud.

Una vez más, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que promueve el derecho a un trabajo digno para todos los seres humanos, ha realizado un extenso estudio para paliar los defectos e injusticias que todavía existen. La OIT califica su informe como "una alianza global contra el trabajo forzoso" y ha sido elaborado como parte del seguimiento a la Declaración sobre los Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). El informe consta de un texto de 87 páginas que contiene los primeros datos de una Organización Mundial sobre el trabajo forzoso actual, tanto a nivel mundial como regional, el número de personas afectadas por el trabajo forzoso, el número de víctimas afectadas por el tráfico humano y las primeras estimaciones sobre las ganancias obtenidas por quienes explotan a los trabajadores traficados. Este primer cálculo mundial de explotación de mujeres, hombres y niños objeto del tráfico, ascienden a 32.000 millones de dólares, lo que equivale a un promedio de 13.000 dólares por cada persona traficada y forzada a trabajar. El informe advierte de que en el mundo hay exactamente 12,3 millones de personas víctimas del trabajo forzoso. El texto también precisa que cerca de 10 millones de estas personas son explotadas por la práctica del trabajo forzoso en la economía privada y no directamente por los Estados. Además, señala que alrededor de 2,4 millones de personas también son víctimas del tráfico con seres humanos. Este documento es el análisis más completo y profundo realizado por una Organización Intergubernamental sobre las características y causas del trabajo forzoso. Se ideó en 1998, a raíz de la Declaración sobre los Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Esta investigación será objeto de debate durante la próxima Conferencia Internacional del Trabajo de la Organización prevista para el próximo mes de junio.

Fotografía de Patricia de Pablo