ANÁLISIS DE LA SEMANA

¡Mamá, quiero ser escritor!

Por Isaac Á. Calvo3 min

Internacional08-09-2002

Ha pasado un año y yo sin enterarme (disculpen la ironía). Al tiempo que en China algunos han hecho su agosto fabricando miles y miles de banderitas estadounidenses para alimentar ese renacido sueño americano, Bush y toda su maquinaria nos han deleitado con una novela mezcla de acción, drama y suspense, digna, cuando menos, de un prestigioso premio literario. Y digna de un prestigioso premio literario en tanto que ha marcado un punto de inflexión en la manera de hacer novela; ya me entienden... Este miércoles ocurrirán muchas cosas a las 13.46 . Justo en ese minuto 46 en el que muchos de ustedes, incluso yo mismo, estaremos volviendo a casa del trabajo, del colegio, de la universidad o de nuestra boda, yo qué sé, se cumplirá exactamente un año de los ataques contra el World Trade Center y el Pentágono. Justo, allí, en el corazón de la Gran Manzana, serán las 08.46 de la mañana y un madrugador ex alcalde convertido en héroe nacional, Rudolph Giuliani, leerá los nombres de las cerca de 2.800 víctimas protagonistas de una novela que versa sobre el mayor atentado de la historia; Historia con mayúscula porque es Historia de la Humanidad. Así comenzará una dura jornada cargada de recuerdos y de actos conmemorativosin memoriam. La ciudad neoyorquina se levantará con la peor resaca de su peor pesadilla pero con el mayor orgullo de la mayor nación. La histeria se disfrazará de aparente normalidad y todos creerán olvidarse de que Bin Laden todavía no ha aparecido. El mundo entero volverá los ojos hacia un país que está dispuesto a comenzar un nuevo capítulo de la novela; aunque pocos parecen dispuestos a escribir el relato de una inminente guerra con Irak, Bush lo tiene claro. Y, al parecer, Blair también. Hasta aquí llega el best-seller pero en la librería encontraremos cientos y cientos de libros más, en muchas ocasiones olvidados por la crítica. Me han hablado de uno que tiene lugar en Kabul y cuya historia transcurre también en ese primer aniversario del 11-S. Uno de los últimos capítulos habla de tres atentados que tuvieron lugar en Afganistán escasos días antes del discurso de Giuliani. En la sección de literatura latinoamericana recomiendan un ensayo sobre Colombia; según un grupo de organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, Colombia no cumple los requisitos necesarios para obtener la certificación que otorga EE.UU. en materia de Derechos Humanos. ¿El futuro? No muy prometedor. Por cierto, se me olvidaba hablaros de una novela que puede convertirse en la más importante de la Historia (otra vez con mayúscula): israelíes y palestinos son los protagonistas principales pero como secundarios aparecen también la Liga Árabe, la UE, EE.UU., Naciones Unidas y, así, una lista casi interminable de personajes dispuestos a tener su minuto de gloria. Eso sí, me han contado que para la publicación queda todavía un tiempo porque los editores no alcanzan un acuerdo sobre el final de una historia que transcurre entre Oriente Medio y despachos de todo el mundo.