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El Gobierno quiere dejar a ETA sin financiación

Por Mª Jesús TorresTiempo de lectura2 min
España28-10-2001

Como todo buen aprendiz, el presidente del Gobierno, José María Aznar, ya avisó que iba a tomar ejemplo del presidente estadounidense y atacar a la banda terrorista ETA no sólo con las fuerzas de seguridad sino también financieramente, cerrando sus vías de ingresos. Tomó buena nota, hizo la petición ante el Congreso y, al poco tiempo, puso una lista de supuestos terroristas en todas las instituciones financieras españolas.

Primero fue la ONU la que literalmente obligó a todos los países miembros a perseguir el terrorismo por todas las vías. Eso incluye acabar con sus recursos financieros. La resolución de la ONU, de alcance global, fue muy estricta. De negarse cualquiera de los 189 países miembros a cumplir la resolución, podrán ser sancionados por el Consejo de Seguridad. A los pocos días, fue la Comisión Europea la que propuso a los Quince un reglamento para congelar los fondos pertenecientes a 27 organizaciones terroristas de la Unión Europea (UE), sin embargo, no incluyó a la vasca. El documento fue aprobado con urgencia y no había tiempo para discutir sobre la inclusión de ETA y el IRA en la lista que manejaban. Pese a este fracaso del Gobierno español, se han conseguido avances en otros frentes. Un ejemplo es el acuerdo alcanzado entre Madrid y México, por el que se comprometieron a profundizar en dos aspectos: "ser eficaces en la congelación de determinadas cuentas financieras y en el intercambio de información entre los diferentes servicios de inteligencia". Esta semana pudieron verse los frutos de dicho acuerdo. El pasado martes, México extraditó a España a Gorka Piqué, presunto miembro de ETA. Dentro de España, el Gobierno también se puso en marcha. El Ministerio de Economía envió a todas las instituciones financieras españolas una lista de supuestos terroristas con el fin de que se bloqueen las cuentas bancarias de esas personas. Esta medida se vio reforzada el pasado 15 de octubre cuando los ministros de Finanzas de la UE acordaron una nueva directiva contra el blanqueo de dinero. En adelante, toda infracción ligada al fenómeno del terrorismo será considerada "grave" y caerá dentro del campo de aplicación de la directiva contra el blanqueo. Las últimas investigaciones del Gobierno se dirigen contra una veintena de empresas editoriales que han recibido subvenciones del Gobierno vasco que podrían estar financiando a la banda terrorista ETA.