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Sadam acusa de espionaje a los inspectores de la ONU

Por Txema GarcíaTiempo de lectura2 min
Internacional12-01-2003

“Compilar listas de científicos, realizar interrogatorios indebidos y recabar información sobre campamentos militares y armas legítimas, esas cosas, o la mayoría de ellas, son de espías”. Con estas palabras durante el discurso del día de las Fuerzas Armadas, el presidente de Irak, Sadam Husein, acusó el pasado lunes a los inspectores de desarme de la ONU de “hacer sobre todo un trabajo de espionaje” para Estados Unidos.

Tras afirmar que se han percatado del “silbido de las serpientes”, presumiblemente en referencia a los inspectores de la ONU y de que ya oyen “el ladrido de los perros”, en supuesta alusión a las amenazas bélicas de Washington, aseguró que están preparados para todo y minimizó la importancia de la presencia militar de EE.UU. en el Golfo Pérsico, que Washington pretende elevar de 60.000 a 100.000 soldados a fines de este mes. “El pueblo y Ejército iraquíes, apoyados por Dios, están preparados para el enfrentamiento y, si se produce la agresión de los aliados de Satán, saldremos victoriosos”, continuó Husein. El líder iraquí calificó al presidente estadounidense, George W. Bush, de “pequeño enano” y añadió que “el enemigo hace ir a los equipos de inspección más allá de los objetivos marcados por el Consejo de Seguridad”, en referencia a Washington. Asimismo, arremetió contra los estados árabes que colaboran en los preparativos de la ofensiva contra Bagdad porque según dijo el objetivo de las amenazas estadounidenses y británicas “no es sólo Irak, sino la ocupación material de toda la zona del Golfo”. “Los enemigos también lanzan su campaña para aterrorizar a los pueblos de Oriente Medio y al mundo, además de encubrir los viciosos crímenes cometidos por la entidad sionista –en referencia a Israel- contra nuestro pueblo en Palestina”, añadió. “La gente ahora presta más atención a la movilización (militar de EE.UU. en el Golfo), así como a las amenazas y los planes de agresión, que a lo que está ocurriendo en Palestina”, continuó el dirigente iraquí quien calificó a los kamikaze palestinos que el pasado domingo 5 de enero perpetraron un atentado en el que fallecieron 23 israelíes, como “campeones del sacrificio, que afrontan con su vida la agresión sionista”. Por su parte, los inspectores de la ONU negaron las acusaciones y en palabras de su portavoz, Hiro Ueki, afirmaron: “Desarrollamos la labor profesional y objetivamente, dentro de los medios de que disponemos”. Mientras, el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, calificó de “lamentables” las acusaciones de espionaje del dictador iraquí y dijo que “el trabajo de los inspectores debe continuar”. El portavoz denunció, asimismo, el saludo de Sadam a los combatientes palestinos del que aseguró que “es horrible que Sadam Husein elogie públicamente a quienes acaban con las vidas de inocentes”. Más expeditivo fue el secretario de Defensa de Estados Unidos, Donald Rumsfeld, quien días después invitó de manera abierta a Sadam Husein a “hacer las maletas” y abandonar el poder para evitar la guerra. Los expertos opinan que el tono beligerante responde a la certeza del dictador de que la guerra es ya inevitable, tras el incremento del despliegue militar de EE.UU. y Reino Unido en los países limítrofes de Irak. Pese a ello, Bagdad permitió que los inspectores continuaran su labor y visitaran sin problemas varias instalaciones que podrían almacenar armas de destrucción masiva, incluida la sede de la Organización Nuclear Iraquí, a unos 20 kilómetros al sur de Bagdad.